Entradas

Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia

La Asamblea General de Naciones Unidas declaró el 11 de febrero Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia en reconocimiento al papel clave que desempeñan las mujeres en la comunidad científica y la tecnología. En su resolución del 22 de diciembre de 2015, el órgano de las Naciones Unidas donde están representados todos los Estados Miembros aprobó una resolución en la que justificaba la proclamación de este Día Internacional y alababa las iniciativas de igualdad.

Datos y cifras

A pesar de que los campos STEM se consideran fundamentales para las economías nacionales, hasta ahora la mayoría de los países, independientemente de su nivel de desarrollo, no han logrado la igualdad de género en STEM:
➡️33,3% porcentaje medio mundial de mujeres investigadoras
➡️Solo el 35% de los estudiantes de carreras relacionadas con las STEM son mujeres.
➡️Las estadísticas muestran un rendimiento similar de chicos y chicas en ciencias y matemáticas, pero persisten los estereotipos de género: muchas niñas siguen sin sentirse alentadas en los campos STEM y tienen opciones limitadas (si es que tienen alguna) para su educación y desarrollo profesional.
➡️Incluso los países que han alcanzado la paridad entre hombres y mujeres en cuanto a investigadores siguen enfrentándose a importantes retos para conseguirla en todos los aspectos, ya que la segregación vertical y horizontal persiste como barrera.
➡️Las mujeres ocupan una pequeña minoría de los altos cargos a pesar de una mejora en los últimos años, hasta la fecha solo 22 mujeres han sido galardonadas con un premio Nobel en una disciplina científica.
La Agenda 2030 incluye el audaz compromiso de «no dejar a nadie atrás» poner de manifiesto las desigualdades que se producen mediante la recopilación y el análisis de datos sistemáticamente desglosados por sexo, edad, ingresos, discapacidad, origen étnico y otros factores pertinentes.

En este Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, se reitera este mensaje fundamental:

Llas mujeres necesitan la ciencia y la ciencia necesita a las mujeres. Solo aprovechando todas las fuentes de conocimiento, todas las fuentes de talento, podremos liberar plenamente el potencial de la ciencia y estar a la altura de los desafíos de nuestro tiempo.

Lo esencial a la hora de marcar propósitos de año nuevo con los hijos es no exigirles nada que como padres no vayamos a hacer

La autora y también experta en salud y educación señala que los niños pueden empezar a plantearse metas a partir de los ocho años y que la labor de los padres, además de ser un ejemplo, es motivarles, ayudarles a reconocer sus emociones y a marcarse objetivos realistas.

Por CAROLINA GARCÍA

La Nochevieja es una velada en el que todos, grandes y pequeños, se llenan de esperanza para entrar con buen pie en el nuevo año. Una celebración que, además, suele ir acompañada de buenos propósitos o metas que se pretenden cumplir en los siguientes 12 meses. Los adultos suelen hacerlo, y algunos los cumplen y otros no. Entonces, ¿es positivo que los niños también se marquen objetivos? “Va a depender mucho de la edad del menor, porque marcar unos propósitos implica tener un nivel de metaconciencia bastante alto”, señala Silvia Álava Sordo (Valladolid, 44 años), doctora en Psicología y experta en salud y educación.“Tengo que tener claro quién soy, cómo me comporto, cuáles son mis puntos fuertes y débiles”, prosigue.

Acompañar a sus figuras de referencia

Para la también autora de libros como Queremos hijos felices: lo que nunca nos enseñaron de 0 a 6 años (Liberespacio, 2022) y El arte de educar jugando (Todostuslibros.com, 2021), esto significa que solo a partir de tener esa conciencia el niño podría saber qué cosas mejorar: “Muchas veces los pequeños quieren acompañar a sus padres y también marcarse propósitos, pero es fundamental tener en cuenta la etapa de madurez en la que se encuentra”. ¿Cuál sería la edad para iniciar este tipo de charlas con ellos? Según la experta, a partir de los ocho años ya se puede conversar sobre cuestiones como: ¿Cómo te ha ido el año? ¿Cuáles crees que han sido tus puntos positivos? “Pero de una forma bastante light. En la adolescencia es cuando realmente se puede incluir más contenido”, agrega.

Hacer balance juntos

Álava señala que es importante que los padres y madres también hagan el trabajo de resumir a sus hijos cómo ha sido su año, en qué cosas han mejorado y en cuáles les gustaría hacerlo. “Cuando hablemos con ellos para que nos cuenten sus vivencias estos meses, lo ideal sería que se alejasen de lo material y que mirasen hacia dentro, que piensen en las cosas que les han hecho felices, mucho más allá de haber tenido un móvil nuevo o una consola”. La psicóloga pone varios ejemplos: “Hemos conseguido aprobar el curso; hacer o mantener los amigos, hemos pasado buenos momentos en familia, en definitiva, poner en valor aquellas cosas que, aunque pueden parecer pequeñas, son enormes”. Lo ideal, asegura, es transmitirles lo importante: “Si, por ejemplo, a tu hijo le ha costado un montón sacar el curso, pero al final lo ha conseguido, debe sentirse orgulloso. Es cierto que esto no es un buen propósito, pero sí que lo sería que se intente organizar mejor para que el nuevo año le cueste menos”.

Marcar los objetivos

Una vez explicado todo esto llega la segunda parte de la conversación: “Bueno, ya sabemos lo que hemos conseguido, ¿y ahora que nos gustaría conseguir este 2024? ¿Y qué es lo que puedes hacer para obtenerlo?”, ejemplifica. “A lo mejor, un buen propósito es mantener los amigos”, prosigue Álava, “que, por cierto, sería uno genial, porque fidelizar las amistades en la infancia y la adolescencia no suele ser tan complicado como para los adultos”. “¿Cómo lo puedo hacer?”, se pregunta la experta, “pues voy a ofrecerles mi ayuda, me voy a alegrar por sus éxitos o simplemente llevar un día al cole mis patatas favoritas y compartirlas con ellos…”. Otro ejemplo que señala es si el niño o adolescente quiere sacar buenas notas: “En este caso, habría que marcar pasos muy concretos como que intente estar más atento en clase para que cuando llegue a casa tarde menos en hacer los deberes o que el menor tenga una agenda en la que apunte todo y así no se despiste y pueda planificarse y organizarse mejor”.

Propósitos para toda la familia

Pero el propósito no tiene por qué ser solo a nivel individual, también puede implicar a toda la familia. Un ejemplo que menciona Álava son las tareas que implica tener una mascota: “Si el hijo es mayor, puede proponerse sacar al perro una vez al día para ayudar en casa, pero, en cambio, si es más pequeño, puede participar en tareas más sencillas como limpiarle las patitas o estar pendiente de ponerle el agua. Cosas fáciles, pero que pueden aliviar la carga sobre los otros miembros del hogar”. “En casa somos un equipo y todos somos parte de ese equipo”, incide la experta.

Para que los niños y mayores no se olviden de los propósitos que se han marcado para este 2024 se pueden apuntar, pero para Álava, sobre todo, lo más importante es que estos salgan del propio niño: “Al igual que los adultos se los marcan ellos mismos, también tienen que ser una necesidad propia del menor, un querer mejorar desde el propio yo, no desde el otro”.

¿Cómo pueden fomentar padres y madres que sus hijos quieran mejorar?

“Lo primero que hay que hacer es diferenciar entre motivación intrínseca y extrínseca”, señala Álava. La extrínseca, según refiere la psicóloga, es aquella que viene del exterior, de los otros. Los niños son sensibles a que a sus padres les vean y les refuercen la buena conducta que hacen con frases como “estoy contento porque te estás esforzando”, según la psicóloga. Pero también hay que trabajar con ellos la parte interior, la motivación intrínseca. ¿Cómo? “Preguntarles cómo se sienten al ver que el perro está contento o al mejorar sus notas. Y explicarles que esa emoción se llama orgullo, satisfacción, y que lo va a sentir siempre y cuando se esfuerce en hacer algo”.

Para Álava es importante no poner el foco únicamente en conseguir el objetivo, sino en el esfuerzo de intentar hacerlo: “Esforzarse en conseguirlo es lo realmente relevante”. La psicóloga también aclara que todo lo mencionado hay que ir inculcándolo desde que los niños son muy pequeños y hay que hacerlo poco a poco.

La importancia del ejemplo

Los niños hacen lo que sus padres hagan, copian los comportamientos, por lo que lo importante es que los progenitores sean un buen ejemplo para sus hijos. “Tú imagínate que hablamos todo esto en familia, lo apuntamos en un papel y yo como padre dije que iba a dejar de fumar, y a los dos días vuelvo hacerlo. Esto no puede ser”, relata Álava. “Hay que tener mucho cuidado, yo no te puedo pedir que tú mejores cada año, que tengas una lista de propósitos, si yo luego no hago lo mismo”. Así que lo esencial a la hora de marcarse propósitos de año nuevo es no exigir nada a los hijos que el padre o la madre no vaya a hacer: “Y no solo porque no vayas a ser un buen ejemplo, sino porque le vas a crear en el menor mucha rabia y frustración”.

Álava recalca que educar sobre la premisa de “es que tú tienes que hacer lo que yo te diga, no lo que me ves hacer a mí” crea una presión bastante importante en el niño y en el adolescente y sentimientos de injusticia. En definitiva, prosigue, si los padres y madres no están dispuestos a cumplir y plantearse objetivos que vayan a hacer y que impliquen que ellos mejoren cosas, incluso, estando dispuestos a que sean los hijos quienes marquen esas metas, “mejor que no los hagan”. Los propósitos de año nuevo tienen que ser reversibles y en ellos tienen que participar ambas partes, padres e hijos, con el mismo nivel de responsabilidad: “Si no se hace así puede ser hasta contraproducente”.

FUENTE: elpais.com

Este es un recordatorio si tienes depresión

Cuando una persona tiene depresión, las actividades cotidianas se sienten más pesadas de lo normal. Incluso, puede llegar a sentir cansancio sin realizar ninguna actividad durante el día. Por ello, es importante descansar si lo necesitas. 

No te olvides que estás haciendo lo mejor que puedes con las herramientas que tienes. 

Un método que puede ayudarte, es ir poniendo metas semanales que puedas cumplir para hacer la activación conductual. No necesitan ser metas grandísimas, más bien se trata de mantenerlas realistas. Por ejemplo: procuraré beber 2L de agua al día, salir a caminar todos los días, etc.

La polémica de Carlos Ríos y los chicles reductores de Mercadona: cómo no caer en los productos milagro para adelgazar. Colaboración con Telva

  • Por PALOMA SANCHO

Ha vuelto a suceder: el dietista y nutricionista Carlos Ríos (creador del Realfooding) ha publicado un vídeo en sus redes sociales desmontando los nuevos chicles reductores de Mercadona. Y no es el único experto que lo ha hecho. Hablamos con una psicóloga y un doctor en ciencia y tecnología de los alimentos que nos explican por qué no caer en la trampa de los productos milagro.

repite conmigo, escríbelo en un post-it o póntelo como fondo de pantalla: no hay productos milagrosos para adelgazar. Ni chicles, ni batidos, ni barrritas. Dicho esto, ¿por qué caemos en este tipo de productos-trampa? En esta ocasión ha sido la cadena de supermercados Mercadona, que acaba de lanzar un nuevo producto que se anuncia como reductor: unos chicles con edulcorantes y aromas añadidos, probióticos y zinc, entre sus ingredientes. Supuestamente este último es el que ayuda a metabolizar la grasa, de ahí que el producto se anuncie como reductor. Sin embargo, tal y como explica Carlos Ríos en su cuenta de Instagram, «un puñado de almendras tiene más zinc que estos chicles, mezcladas con un yogur natural sumas los probióticos y así estás tomando comida real, con mayores beneficios y sin los aditivos de los chicles». Yo ya estoy convencida, pero por si acaso tú todavía, no hablamos con dos expertos que nos ayudan a evitar caer en este tipo de productos milagro. Y vamos a concienciarnos de que la única solución es aprender a comer sano, tal y como nos cuenta el nutricionista Guillermo Rodríguez en nuestro podcast, que puedes escuchar pinchando aquí:https://omny.fm/shows/la-belleza-es-nuestra/e02-aprende-a-comer-saludable-sin-obsesionarte-con/embed

NO CAIGAS EN LA TRAMPA

«La preocupación, la desesperación o el desconocimiento, sumados a la desinformación y la publicidad engañosa, nos llevan a buscar soluciones fáciles a problemas complejos, como son el sobrepeso y la obesidad«, nos explica Miguel A. Lurueña, doctor en ciencia y tecnología de los alimentos, divulgador científico y autor del blog Gominolas de petróleo.

Y es que todos hemos caído alguna vez en la trampa de las dietas milagro. La doctora en psicología, psicóloga, profesora de Universidad, conferenciante y escritora Silvia Álava nos explica por qué: «No somos tan racionales como nos gustaría. Somos más emocionales y muchas veces creemos lo que queremos creer. Y caemos en lo que se denomina sesgo de información. Es decir, en creer aquella información que de forma inconsciente nos viene bien, como adelgazar sin esfuerzo. Y nos reforzamos en nuestra decisión con argumentos tipo total, qué voy a perder, es un simple chicle… Tenemos sesgos que nos llevan a tomar estas decisiones».

También nos explica que «puede haber una disonancia entre lo que yo quiero y lo que hago. Quiero adelgazar pero no hago nada (comer más sano y hacer ejercicio). Y este tipo de productos milagro entran como solución. Hay una parte de nosotros que sabe que no funcionan, pero aún así los probamos. Parece que nos alivia la conciencia tomar esos chicles». Y nos advierte que «para evitarlo, una máxima: huye de todo lo que sea sin esfuerzo. Lo único que funciona es un cambio de hábitos y aprender a comer de forma saludable«, sentencia.

LOS CHICLES DE LA POLÉMICA

Analizando la etiqueta de los famosos chicles vemos dónde está la trampa. Según nos cuenta Miguel A. Lurueña, «para que en la etiqueta de un alimento se puedan incluir declaraciones de salud (por ejemplo, «el zinc y los probióticos adelgazan»), deben haber sido aprobadas previamente por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), en base a la existencia de evidencias científicas que lo respalden. En el caso de los probióticos no hay ninguna declaración aprobada en este sentido. Para el zinc sí hay declaraciones aprobadas, como «el zinc contribuye al normal metabolismo de las grasas». Esto no significa que ayude a adelgazar. Lo que quiere decir es que para metabolizar las grasas necesitamos zinc, igual que lo necesitamos para muchas otras cosas, como la síntesis de proteínas o el mantenimiento de los huesos. Si no lo tenemos en cantidad suficiente, nuestro organismo no funcionará correctamente. Pero consumir más cantidad no va a hacer que funcione mejor, es decir, no va a hacer que adelgacemos. Además, ese mineral podemos obtenerlo sin problema a partir de muchos otros alimentos que forman parte de una dieta normal (como la carne o las almendras, por poner dos ejemplos). En definitiva, ni los probióticos ni el zinc son adelgazantes».

NI ADELGAZAR, NI PESO… LOS HÁBITOS SON LO IMPORTANTE

Si quieres adelgazar no hay fórmulas mágicas. «La solución pasa por adquirir unos hábitos saludables y mantenerlos de por vida«, recomienda Miguel. Es decir, seguir una dieta saludable (basada principalmente en alimentos frescos o poco procesados, sobre todo de origen vegetal: frutas, verduras, legumbres, hortalizas… a los que podemos sumar otros saludables de origen animal, como huevos o pescado), realizar actividad física y evitar el tabaco y el alcohol. «Todo esto es fácil de decir pero a veces muy difícil de aplicar. Por eso a veces es necesario buscar ayuda profesional. En este caso, el profesional de referencia es el dietista-nutricionista», aconseja. También puedes empezar por los trucos que nos da en su libro y que te recomiendo leer: Que no te líen con la comida (2021, Ed. Destino).

FUENTE: TELVA.COM

Lo mejor de tu vida eres tú: presentación del nuevo libro de María Jesús Álava Reyes

«Sí, los niños también se deprimen» Colaboración con el diario ABC

Claves para que los niños disfruten de un buen inicio del curso escolar. Colaboración con Antena3 TV

Sobre el rescate de los niños en Tailandia: «Son un equipo, deben tomárselo como un reto». Colaboración con Antena3 Noticias

«La madre perfecta no existe» Colaboración con Laura Peraita, del diario ABC

Trucos para concentrarte. Colaboración con la revista Magazine