Tengo diez años y no voy a clase: mis padres me educan en casa. Colaboración con Magnet, en Xataka.com

Os adjunto parte de colaboración en el amplio e interesante reportaje realizado por Javier Lacort y Alesya Mo sobre homeschooler.

Tipos de homeschooling:

  • Homeschool: Es quizás la opción más habitual, aunque dentro de ella hay varias pedagogías que cada familia puede escoger: la educación clásica, Waldorf, Montessori… En todas ellas son familias que siguen un currículo y una metodología, aunque dentro de casa, en el ámbito familiar, y no en un colegio.
  • Unschool: Es el que no sigue ningún currículo académico, sino que la familia decide qué contenidos se van a aprender, en qué etapas, y de qué forma. Es la figura más alejada de la escolarización tradicional y cada familia escoge su camino a seguir. Hace más difícil el paso a la escolarización tradicional si el niño lo desease en algún punto.
  • Flexischool: Combina la escuela tradicional con la enseñanza en familia. En España esta opción no es posible a día de hoy, ya que requeriría del visto bueno del colegio.

Socializar sin colegio

El mediodía está a punto de llegar y la familia de Yvonne y Andreu sigue educándose a su manera. Ahora los tres hijos ponen música en una tablet y bailan unas coreografías en el salón de casa. La educación artística y motriz es importante en este hogar. Y también la gastronómica.

Es la hora de comer y, por primera vez desde el amanecer, la familia habla en castellano o en catalán. Urtzi acude a los fogones, Ainara empieza a pelar verduras. «Antes hacía yo la comida, pero un día se me ocurrió que ellos también podían ayudarme. No solo aprenden a cocinar, también aprenden mucho sobre los alimentos, o incluso ejercitan el cálculo. Si ven una receta para cuatro, tienen que calcular solos las cantidades para cinco».

Este tipo de aprendizaje se queda corto en opinión de la psicóloga educativa Silvia Álava, quien cree que el niño «no va al colegio únicamente a aprender contenidos, sino también a socializarse, a aprender habilidades como el trabajo grupal, jugar con los demás, aprender a respetar al otro».

De la misma forma, ve lagunas, no en casa de esta familia, sino en la aplicación en general de este modelo. «También hay que ver qué persona es quien se encarga de educar en casa. No es que dude de un padre o una madre, pero eso no significa que vayan a ser buenos profesores. Y los roles pueden quedar cruzados: el niño tal vez necesite en un momento dado a su padre o a su madre, pero no a su profesor”.

«Las actividades extraescolares son necesarias para ellos, porque socializan, y para nosotros, los padres, para no volvernos locos»

Pincha aquí para leer el artículo completo con la participación de otros testimonios como Javier Urra, Laura Mascaró, Alberto Sole, Eparqio Delgado, o Ybone Laborda