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El juego es el vehículo perfecto para conectar a padres e hijos y fomentar el apego y el vínculo

La especialista en Psicología Educativa y otros 15 colegas de gabinete Álava Reyes presentan el libro ‘El arte de educar jugando’.

«El juego tiene un papel fundamental en el proceso de aprendizaje de los niños».

«Los niños pasan gran parte de su vida jugando y que cuando juegan se desarrollan muchos procesos, no solamente a nivel cognitivo sino también la seguridad, la autoestima o las habilidades sociales».

¿Qué importancia tiene el juego en la vida de los niños? Sin duda, una importancia máxima. Pero, Qué papel posee el juego en la educación y los procesos de aprendizaje del hoy niño y futuro adulto? ¿Y cómo pueden participar los padres en este proceso? A esta pregunta responde la especialista en Psicología Educativa Silvia Álava y otros 15 compañeros del gabinete Álava Reyes en el libro El arte de educar jugando (JdeJ Editores, 2021).

“No se trata de dar fórmulas mágicas porque las fórmulas mágicas no existen sino de aportar ideas y sugerencias. Es importante saber reconocer que los niños pasan gran parte de su vida jugando y que cuando juegan se desarrollan muchos procesos no solamente a nivel cognitivo – la atención, la concentración, la memoria, el razonamiento lógico…- sino también la seguridad, la autoestima, las habilidades sociales… Muchos padres se preguntan ‘¿qué puede hacer que mi hijo lo aprenda?’. A través del juego es completamente posible educar en valores y enseñarles todas estas competencias emocionales”, dice la coautora.

El arte de educar jugando

El arte de educar jugando aborda temas tan fundamentales en la etapa infantil como la estimulación del cerebro, cómo lograr que presten atención, cómo fomentar su autonomía y su autoestima, o cómo relacionarse con los demás. Pero además, los autores también han querido incluir asuntos más novedosos como el de cómo lograr una buena educación afectivo-sexual, qué pautas debemos seguir para el uso idóneo de las nuevas tecnologías o cómo educar en la igualdad de género.

Para ello, el libro se ha estructurado en 14 capítulos que están escritos por un psicólogo o psicóloga diferente y especialista en cada uno de los temas, tanto desde su experiencia directa trabajando con niños como de investigación. “Se trata de que los padres puedan invertir su tiempo y los recursos que tienen a su alcance en algo que, sin lugar a dudas, es uno de los trabajos más importantes de sus vidas: educar. Y el problema es que para educar nadie nos ha enseñado por lo que se trata también de orientarles desde la evidencia científica, desde las cosas que sabemos que está documentado que funcionan”.

En seis pasos

Cada capítulo está estructurado en seis pasos. El primero de ellos cuenta cuál es la habilidad que se va a trabajar, el segundo explica por qué es tan importante trabajarla y qué nos dice la ciencia al respecto, y luego se pasa al cómo, a las propuestas de juegos y ejercicios para hacer en familia. A su vez estos ejercicios están divididos por edades en franjas de 0 a 3 años, de 3 a 6 años, de 6 a 9 años y de 9 a 12 años. “En cada uno de los juegos explicamos qué vamos a hacer: primero saber para qué sirve en concreto ese juego, luego qué tipo de habilidad o destreza estamos trabajando. Además está muy detallado el cómo, siguiendo unos pasos para que no quede ningún tipo de duda de cómo lo debemos hacer; y luego vendría el cuándo: la sugerencia de en qué momentos se podría utilizar… Y terminamos cada capítulo con un ‘Recuerda’ donde resumimos los principales tips”, explica Álava. El libro está pensado para leer en el orden en que está escrito o bien elegir un capítulo concreto y buscar los ejercicios indicados a la edad de cada niño.

Emociones positivas para aprender mejor

Aroa Caminero, neuropsicóloga infantil experta en inteligencias múltiples y autora del capítulo Estimula su cerebro, explica la importancia del juego para lograr una correcta estimulación del cerebro: “Sabemos que se aprende muchísimo mejor a través de las emociones positivas y que los niños cuando hacemos con ellos actividades lúdicas y de juego están activando áreas cerebrales del placer, de la curiosidad y de la motivación”.

Por su parte, la doctora en psicología clínica Tatiana Fernández, responsable del capítulo Consigue que presten atención habla del papel básico de los progenitores en esta tarea: “¿Podemos dotar de herramientas a los niños para mejorar la atención? La respuesta es que sí. De hecho, muchos de los juegos que han usado los padres con sus hijos durante la pandemia para estar entretenidos también necesitaban ‘de pararse’, por lo que el confinamiento ha sido un escenario muy interesante para desarrollar esta habilidad”.

Enseñarles a pensar por sí mismos

Enseñarle a pensar por sí mismo es el capítulo que insiste en la necesidad de desarrollar el pensamiento crítico a través de juegos que pueden aplicarse en la vida diaria de las familias. “Cuando un niño no ha sido educado en el pensamiento crítico corre el riesgo de ser condicionado por manipuladores emocionales. El pensamiento crítico les obliga a escoger, a no creer todo lo que ven, lo que leen y lo que escuchan, y a formar sus propias conclusiones. Además, también influye en el desarrollo de la creatividad, la resolución de conflictos, la empatía, la adaptación a situaciones nuevas, la autonomía…”, afirma Bárbara Martín, experta en terapia psicológica con niños y adolescentes.

Como importante es que los padres faciliten estrategias para trabajar la autoestima: “Los padres ejercen un papel fundamentan en la valía de sus hijos desde su más tierna infancia. Los mensajes que nos transmiten en la infancia son las voces internas que nos van acompañando en nuestro diálogo interior a lo largo de nuestro futuro. Validarles, dedicarles tiempo en exclusiva, hacer que se sientan importantes es fundamental para reforzar la seguridad en ellos mismos y todo esto puede conseguirse a través del juego”, señala la psicóloga Lucía Boto Pérez.

Figuras de seguridad

El arte de educar jugando incluye también otros interesantes capítulos como Vencer los miedos del día a día. “El objetivo del capítulo es que los padres puedan entender la manifestación de la emoción del miedo que aparece en las distintas etapas del desarrollo de sus hijos. El juego para gestionar el miedo mejora la percepción que tienen de nosotros como figura de seguridad y les ayudamos a conectar con otras emociones como la valentía o el humor”, explica la psicóloga experta en conducta infantil Gema Valenzuela.

Portada del libro 'El arte de educar jugando'
Portada del libro ‘El arte de educar jugando’.

Family Game, iniciativa de Movistar y Malasmadres para el uso responsable de los videojuegos

Movistar y el Club de Malasmadres han puesto en marcha el proyecto Family Game, una iniciativa para acompañar a las familias a hacer un buen uso de la tecnología y de los videojuegos en casa, y con ellos hemos colaborado.

Os dejo el vídeo del evento en el que tuve la oportunidad de participar:

¡Que no les falte el juego!

Comparto con vosotros el la grabación del webinar realizado con motivo de la celebración del Día del niño y de la niña.

No te lo pierdas si quieres saber más para educar mejor y descubrir la importancia del juego en la educación de los pequeños de la casa:

Juegos educativos para mejorar la atención y concentración en los niños

Los mejores juegos infantiles que ayudarán a los niños a estar más concentrados

Quién dijo que jugar y aprender no van de la mano, de seguro desconoces el gran valor que tiene para el proceso de aprendizaje de tu hijo o hija el dedicar tiempo a jugar. No te preocupes porque a muchos nos ha pasado, es por ello que aquí te explicamos la importancia de los juegos educativos para los niños y te proponemos algunas ideas de juegos que trabajan la atención y concentración en ellos.

El juego en los niños no es una actividad típica de su edad que solo busca distraerlos, en realidad, constituye una herramienta de suma importancia para su salud y desarrollo, permitiendo ayudarles en aspectos tan importantes como su atención y concentración, es así como existen juegos educativos para mejorar la atención y concentración de los niños que podrás poner en práctica.

Índice

  1. ¿Por qué jugar ayuda a mejorar la atención y concentración de los niños?
  2. Tipos de atención infantil que podemos reforzar con juegos
  3. ¿Qué juegos educativos trabajan la atención y concentración en los niños?

¿Por qué jugar ayuda a mejorar la atención y concentración de los niños?

Los juegos educativos tienen un valor significativo para el desarrollo cognitivo, la adquisición de habilidades, destrezas y en particular, para el fortalecimiento de la capacidad de atención y concentración en los niños, en especial para aquellos que presentan dificultad de atención en sus casas o colegios.

Aquí te explicamos los diferentes tipos de atención que existen para que de acuerdo a esto, puedas identificar los juegos adecuados.

Tipos de atención infantil que podemos reforzar con juegos

Conocer los diferentes tipos que existen en relación a la atención de nuestros hijos nos permitirá ofrecerles juegos específicos para trabajar sus habilidades.

  1. Atención sostenida: se refiere a la cantidad de tiempo que el niño puede atender a una actividad o estímulo determinado, esta capacidad va aumentando a medida que va creciendo, es así que un niño en edad infantil puede mantener la concentración prolongada durante 5 minutos y un adolescente por más de 30 minutos.
  2. Atención selectiva: se refiere a la calidad de la atención, es decir, a la capacidad de procesar un estímulo o actividad relevante eliminando la información irrelevante que se le presenta, esto permite que el niño se focalice en algo puntual.
  3. Control de la interferencia: esta permite mantener la atención en una actividad inhibiendo los estímulos de su entorno, por ejemplo: ruidos. En los niños con TDAH (trastorno por déficit de atención e hiperactividad) es uno de los puntos en que más presentan dificultad.

¿Recuerdas cuando jugabas parchís o parqués, escalera o burro?, ¡llegó la hora de desempolvarlos!

¿Qué juegos educativos trabajan la atención y concentración en los niños?

Juegos educativos para estimular la atención sostenida

Aquellos que no son dirigidos y en los cuales no interfiera una pantalla (videojuegos), ¿la razón?, estos juegos producen cambios rápidos de estímulos que llevan al niño al mínimo esfuerzo para mantener su concentración por un tiempo prolongado. Para los niños con TDAH no es recomendable estos juegos dada la alta probabilidad de crearles adicción a los videojuegos.

  • Juegos clásicos
  • Juegos de mesa
  • Ajedrez
  • Laberintos
  • De construcción como lego, bloques para armar
  • Cubo Rubik
  • Cartas o naipes: además de fortalecer la atención sostenida, desarrolla la atención dividida, el razonamiento numérico, la comunicación no verbal, entre otros, además fomenta la unión y consolida los lazos familiares.

Juegos infantiles para estimular la atención selectiva

A continuación, te proponemos algunos juegos educativos que nos ayudan a trabajar la atención selectiva. Son todos aquellos que necesiten poner la atención a una sola tarea.

  • Juegos de búsqueda visual
  • Encontrar el personaje
  • Hallar las diferencias
  • Sudokus, crucigramas y sopas de letras
  • Juegos de memoria
  • Juegos asociativos

Juegos para estimular la planificación en los niños

Por último, nos centramos en algunos juegos para niños que son muy útiles para trabajar la planificación y la estrategia. Son todos aquellos que animan a los niños a dirigir su conducta a una meta específica.

  • Astucia Naval (Hundir barcos)
  • Dominó
  • Tres en raya o Triqui

Ahora que ya sabes la importancia del juego en el desarrollo de los niños y lo esencial que es reservar espacios para realizar actividades divertidas que fomenten mentes sanas y emociones saludables, solo nos queda ¡salir a jugar!

Puedes leer más artículos similares a Juegos educativos para mejorar la atención y concentración en los niños, en la categoría de Juegos en Guiainfantil.com.

Ideas de juegos caseros para fomentar la autonomía de los niños de 3 a 8 años

¿Cómo podemos ayudar a nuestros hijos a ser más autónomos? La doctora en psicología Silvia Álava nos propone algunos juegos caseros con los que podemos fomentar la autonomía infantil, de los 3 a los 8 años. ¿Jugamos y aprendemos?

https://youtu.be/2ndn1Ys521s
  • Cómo trabajar la autonomía infantil desde la primera infancia (00:09)
  • Enseñar a los niños a responsabilizarse de sus tareas (01:31)
  • La importancia de dar tiempo a los niños para hacer las cosas solos (01:54)
  • Cómo enseñar a los niños a jugar solos (03:00)
  • No hagas por tu hijo lo que él o ella sepa hacer (04:22)

Enseñar a los niños a jugar solos para fomentar su autonomía (y más tips)

Ayudar a tus hijos a ser más autónomos e independientes a través de la responsabilidad y el juego.

Fomentar la autonomía en los niños es fundamental si queremos que estos tengan un correcto desarrollo y puedan asumir las responsabilidades adecuadas para cada edad, pero también estableciendo hábitos como que, por ejemplo, el niño juegue solo. Por ello, es esencial empezarla a trabajar la autonomía desde muy pequeños a través del juego y con pequeñas tareas domésticas o de cuidado personal.

Establecer rutinas, darles espacio y adaptar lo que les pedimos es fundamental para que ellos sientan que pueden conseguirlo y, por ende, crezcan felices, sanos y con una buena autoestima.

Índice

  1. Como fomentar la autonomía y responsabilidad de los niños
  2. Cómo y por qué enseñar a los niños a jugar solos
  3. Educar a niños más autónomos e independientes

Como fomentar la autonomía y responsabilidad de los niños

A partir de los 2 años, más o menos, los niños tienen un gran entusiasmo a la hora de hacer cosas por ellos mismos: estamos en la fase del ‘yo puedo solo‘, del ‘yo quiero hacerlo’. Aprovechar esta fuerza, esta confianza, que sale de nuestro pequeño es fundamental para empezar con el desarrollo de la autonomía. En este punto, pues, es vital que tengamos mucha paciencia con ellos y que los animemos a que realicen las tareas por su cuenta.

Las tareas que pueden realizar los niños en esta edad son bastante básicas, pero debemos entender que son un mundo para ellos. Por este mismo motivo, no solo debemos mostrarles nuestro apoyo, sino que debemos animarlos y no presionarles; debemos dejarles su tiempo y su espacio.

Un juego al que podemos jugar en esta etapa, como no podría ser de otro modo, es el de ser mayor. En este caso, les podemos pedir que tiren los pañales al cubo de basura correspondiente o bien dejarles que empiecen a vestirse y desvestirse de forma autónoma, y que depositen la ropa sucia para lavar, etc. Siempre dándoles responsabilidades que se encuentren dentro de sus capacidades.

Cómo y por qué enseñar a los niños a jugar solos

Otra manera en la que podemos fomentar la autonomía de los niños es enseñándoles a jugar solos. Sí, aunque a veces nos parezca que no es bueno, debemos aprender a dejar que jueguen solos. Evidentemente, compartir todo el tiempo que podamos con ellos es muy bueno, fantástico. Pero, también deben aprender a estar solitos y a pasar ratos con ellos mismos; darles espacio para que vayan fomentando su creatividad y vayan siendo conscientes de todo cuanto pueden llegar a conseguir si se lo proponen. 

Conseguir que los niños jueguen solos es bastante simple si seguimos unas pequeñas pautas: lo primero, será conseguirles un juego que les guste y que fomente tanto la creatividad como el razonamiento. Por ejemplo, los bloques de construcción y los muñecos.

Cuando queramos empezar a enseñarles a jugar solos, vamos a darles unas pequeñas pautas como, por ejemplo, ‘construye una escuela y ahora vengo yo a verte y ayudarte’. Y, dejamos pasar unos minutos antes de ir a ver todo lo que han hecho. Esta pequeña pausa en la que los dejamos solos debe ir aumentándose poco a poco hasta que los niños sean capaces de jugar sin necesitar de los adultos.

Y, a medida que vayan sumando años, vamos añadiendo juegos adaptados a su edad, tareas del hogar y responsabilidades en su cuidado personal

Educar a niños más autónomos e independientes

Como hemos dicho, cerca de los 2 años, los niños tienen una necesidad de demostrar, y demostrarse, que pueden hacer las cosas por ellos mismos, de tener más autonomía. Y, aquí, los padres debemos ir con mucho cuidado. Pese a que, a veces, vayamos con el tiempo justo o sepamos que los niños no van a hacer algo como se lo hemos enseñado, debemos evitar el ‘ya lo hago yo’ y ‘te ayudo, porque tú solo no puedes’.

Por un lado, el ‘ya lo hago yo’ se debe evitar porque es muy fácil que los niños se acostumbren, luego, a que lo hagamos todo nosotros. Y lo hacen muy rápidamente. Por ello, debemos armarnos de paciencia y darles el tiempo necesario para que hagan de forma autónoma lo que les hemos pedido.

Por otro lado, el ‘te ayudo, porque tú solo no puedes hacerlo’ también se debe evitar, ya que esto transmite a los niños una falta de confianza en sus habilidades. Y, si nosotros no confiamos en ellos, ¿quién lo hará? Debemos entender, también, su punto de vista y ser muy empáticos con ellos en todo momento. Si nuestros hijos ven, por el contrario, que los animamos, no solo mejorarán su autonomía, sino que incrementarán muchísimo su propia autoestima.

Enseñar responsabilidad a los niños y hacerlos más autónomos es tarea y responsabilidad de los papás y mamás si queremos verlos crecer felices y sanos, además de ofrecerles las herramientas necesarias para que puedan convertirse en adultos con una vida plena. 

Puedes leer más artículos similares a Enseñar a los niños a jugar solos para fomentar su autonomía (y más tips), en la categoría de Autonomía en Guiainfantil.com

Estas son las habilidades sociales que debemos entrenar en nuestros hijos desde pequeños

El éxito de sus relaciones personales dependerá de lo desarrolladas que tengan estas habilidades sociales.

Por María Dotor

Los seres humanos somos seres sociales. Desde que nacemos, nos relacionamos con otras personas, y nuestra felicidad depende, en gran medida, de cómo de satisfactorias sean estas relaciones.

Para que nuestros hijos tengan relaciones satisfactorias hace falta que dispongan de buenas habilidades sociales. Estas habilidades no son innatas, sino que se aprenden a través de la observación de los demás, de las enseñanzas de otras personas, de la interacción directa con el medio…etc.

Para que nuestros hijos tengan relaciones satisfactorias hace falta que dispongan de buenas habilidades sociales. Estas habilidades no son innatas, sino que se aprenden.

¿Qué habilidades sociales son las más importantes? ¿Cuáles deberíamos inculcar a nuestros hijos? Las repasamos con la ayuda de la psicóloga Sara Ríos Gil, quien las recoge en un capítulo del libro ‘El arte de educar jugando’, de Silvia Álava.

Habilidades sociales básicas y habilidades sociales complejas

Para Ríos Gil, las habilidades sociales se dividen en dos grupos: las básicas y las complejas.

Habilidades sociales básicas

  • Saber escuchar: aquí es fundamental el lenguaje no verbal: mirar a los ojos, asentir con la cabeza, sonreír cuando sea oportuno… «Esto es algo que tenemos que enseñarles sobre todo con el ejemplo», nos dice Ríos Gil.
  • Iniciar una conversación: es básico saber identificar si es un buen momento para iniciar una conversación o la persona no está disponible.
  • Mantener una conversación: una vez que hayamos iniciado una conversación, hay que saber mantenerla. «Una buena escucha activa es fundamental para que el otro se sienta atendido y eso dé pie a seguir la conversación haciendo nuevas preguntas. También hay que saber cómo introducir un tema nuevo sin interrumpir al otro».
  • Terminar una conversación: «evitando ser bruscos y tratando de no cortar a la otra persona».
  • Presentarse adecuadamente: «podemos ayudar a nuestros hijos a entender qué cosas se dicen en una primera presentación y qué cosas nos guardamos para nosotros».
  • Dar las gracias en las ocasiones correctas: aquí nuestro ejemplo es vital. «Somos modelos de conducta. Si nos ven que somos agradecidos con los demás, les será más fácil serlo a ellos».
  • Hacer un cumplido: los cumplidos nos ayudan a establecer relaciones positivas con los demás, no obstante, nos dice Ríos Gil, «conviene intentar no excedernos en los cumplidos porque puede verse como exagerado y poco natural».

Habilidades sociales complejas

  • Saber decir ‘no’ adecuadamente: no siempre tenemos que estar de acuerdo con lo que nos dicen los demás, ya que cada uno tenemos nuestra forma de pensar, y tenemos derecho a decir ‘no’, pero «teniendo en cuenta no ser bruscos ni ofender a los demás, sino expresar nuestra negativa con respeto».
  • Realizar una petición: sin exigir, de manera adecuada. «Y si la otra persona dice que ‘no’, aceptarlo sin enfadarnos ni alterarnos».
  • Tomar decisiones: nos cuesta mucho tomar decisiones, en cambio, es algo a lo que nos tendremos que enfrentar muchísimas veces a lo largo de nuestra vida. Debemos entrenar a nuestros hijos para ello «ayudándoles a definir las opciones, los pros y contras de cada una de ellas, buscar alternativas o soluciones…».
  • Defenderse correctamente de una crítica: hay diversas maneras de reaccionar ante una crítica. «Hay que enseñar a los niños a defenderse de ellas sin alterarse ni enfadarse».
  • Expresar alguna queja: debemos dejarles claro que no pasa nada por expresar aquello que no les guste, pero «hay que enseñarles a hacerlo correctamente, desde el respeto, explicando bien el por qué no le ha gustado y ofreciendo una alternativa».

¿Cómo entrenamos estas habilidades sociales?

Para entrenar las habilidades sociales de nuestros hijos, Ríos Gil da una serie de claves:

  • Los adultos somos referentes de nuestros hijos; constantemente nos están observando y copiando. Por ese motivo debemos ser un buen ejemplo a nivel social y hacer con los demás las cosas que queremos que hagan ellos.
  • Es fundamental que desde pequeños fomentemos que estén con otras personas de confianza además de nosotros y también con otros niños de su edad.
  • El desarrollo social de un niño tiene lugar poco a poco, y esto hay que tenerlo en cuenta para saber qué pedirle en cada etapa de su vida.
  •  Utilicemos el juego para inculcar estas habilidades. Por ejemplo, podemos hacer un teatro de presentaciones para enseñarles de manera amena y divertida la importancia de presentarse a los demás y cómo hacerlo correctamente. También podemos jugar con una pelota en la mano a respetar los turnos de palabra. Sacaremos un tema, debatiremos sobre él, pero solo podremos hablar cuando tengamos la pelota en la mano.

FUENTE: laopiniondemurcia.es

«Los niños necesitan una vacuna emocional porque viven más tristes, más enfadados y juegan menos con otros menores»

Según el estudio «Salud mental en la infancia», los hijos discuten más con sus padres y ven menos a sus abuelos, tíos y primos. «Necesitan recursos para prevenir problemas de salud mental», apuntan los expertos

Laura PeraitaLaura PeraitaSEGUIR

La pandemia y las restricciones han afectado a la salud mental de hasta el 45% de los niños españoles. Así al menos lo asegura el estudio «Salud mental en la infancia» realizado por la Guía de AIJU, el Instituto Tecnológico de Producto Infantil y Ocio, y presentado con motivo del Día del Niño y de la Niña en España. El objetivo de este informe es ofrecer una serie de datos de la radiografía actual de los menores en nuestro país con el propósito de tomar las medidas pertinentes para prevenir el sufrimiento en la infancia. Y es que, tal y como apuntó Pablo Busó, coordinador del área de investigación infantil y pedagogía de AIJU, los estados de ánimo y las emociones de los niños después de la pandemia son hasta en un 40% de los casos más negativos.

Sigue leyendo el artículo en el diario ABC.

9 juegos tradicionales que NO sabías que benefician tanto a los niños

¿Cuáles son los beneficios del juego que hace que los niños sigan aprendiendo?

Jugando, los niños aprenden más y mejor. A través de los juguetes y las actividades que más les entretienen, nuestros hijos desarrollan habilidades que son esenciales en su desarrollo. Por ello, los niños necesitan jugar todos los días. Los juegos tradicionales (los más sencillos, los juegos de siempre) permiten a los niños poner en marcha procesos cognitivos que potencian sus capacidades. Te sorprenderá ver que los juegos más beneficiosos para los niños son los juegos de siempre.

Índice

  1. Juegos tradicionales que benefician mucho a los niños
  2. Por qué los niños aprenden tanto jugando
  3. Cuáles son los beneficios del juego para los niños
  4. Por qué hay que elegir juguetes adecuados a la edad de tus hijos

Juegos tradicionales que benefician mucho a los niños

A veces, los padres nos desesperamos buscando juguetes o juegos que resulten muy estimulantes y atractivos para nuestros hijos. Sin embargo, nos olvidamos de que son los juegos tradicionales más sencillos los que permiten a los niños poner en marcha estos procesos cognitivos tan importantes. A continuación vamos a ver algunos ejemplos prácticos; vamos a nombrar algunos de los entretenimientos favoritos de los niños para analizar qué área trabaja.

1. Los puzles
Con los puzles o rompecabezas, los niños trabajan la orientación espacial, la memoria de las formas y el razonamiento lógico.

2. El fútbol y otros deportes de pelota
Hablamos de fútbol, baloncesto, hockey, etc. Y los niños trabajan procesos como la motricidad gruesa, la coordinación general, la velocidad de procesamiento, los reflejos y el trabajo en equipo.

3. Los dibujos
Cuando los niños pintan, trabajan la psicomotricidad fina, pero también la creatividad, la paciencia, la tolerancia a la frustración

4. El escondite (las escondidas o las escondidillas)
Este popular juego en el que un niño se esconde y otro le busca, se trabaja la motricidad gruesa, el trabajo en equipo, la tolerancia a la frustración, el cumplimiento de las reglas del juego

5. Los coches o carros de juguete
Este tipo de juguetes son ideales para que los niños practiquen la coordinación óculo-manual y su creatividad.

6. Las muñecas o los bebés de juguete
A través de los juegos que consisten en el cuidado de un muñeco, así como la recreación de diferentes juegos simbólicos, los niños trabajan la psicomotricidad fina, las habilidades socioemocionales, la adquisición de vocabulario, su creatividad y mucho más.

7. Los disfraces
A algunos niños les gusta mucho jugar a disfrazarse o maquillarse. En este caso, se trata de un juego con el que trabajan la psicomotricidad fina, la creatividad y las habilidades socioemocionales.

8. Las manualidades
Sabiendo de los grandes beneficios para los niños de hacer manualidades, son muchos los padres que animan a sus hijos a crear pequeñas obras artísticas. Con esta actividad se trabaja la psicomotricidad fina, la tolerancia a la frustración, la creatividad, la paciencia y funciones ejecutivas.

9. Cantar y bailar
Pon música… ¡y a cantar y bailar! Con este tipo de juegos tradicionales trabajamos la motricidad gruesa, la coordinación gruesa y las habilidades emocionales.

Por qué los niños aprenden tanto jugando

Debemos de rescatar el valor del juego como potenciador del aprendizaje de los niños. La neuropsicología nos muestra que el aprendizaje se consolida mejor a través de las emociones agradables y los niños sienten muchas de estas cuando juegan. Pensar que los niños tienen que sufrir o pasarlo mal para aprender (seguro que has oído en alguna ocasión eso de ‘la letra con sangre entra’) no tiene ninguna base científica. Lo que se aprende jugando se retiene y se reproduce mejor.

De forma lúdica mejoraremos no solo la dinámica familiar, sino que trabajaremos con los niños habilidades que los psicólogos sabemos que son esenciales para el correcto desarrollo de los niños. No se trata de fórmulas mágicas, ni de obligaciones adquiridas, sino de ideas en forma de juegos tradicionales que nos ayudarán a trabajar distintas habilidades de los más pequeños de la casa.

Los niños pasan mucho tiempo de su vida jugando. Y lo más interesante es que jugar no es solo divertirse; cuando los niños juegan están aprendiendo y se consolidan muchos procesos cognitivos. A través del juego se adquieren conocimientos y valores, además de generarse emociones agradables.

Cuáles son los beneficios del juego para los niños

Por lo tanto, si enumeramos algunos de los beneficios que el juego tiene para los niños…

– Cuando los niños juegan, adquieren autonomía
Según van creciendo, les iremos pidiendo a nuestros hijos que cada vez se entretengan solos durante más tiempo, que sean ellos quienes decidan a qué jugar y que sean capaces de dirigir su juego. Es importante que les dejemos esta libertad, pues los niños necesitan ir adquiriendo autonomía.

Es posible que, al principio, nos llamen para que juguemos con ellos. Pero se trata de ir dejando, progresivamente (primero nos vamos 5 minutos, luego 15, a continuación 40 minutos…), que vayan jugando solos.

– El juego aumenta la seguridad de los niños y la confianza en ellos mismos
Los niños son los que dirigen el juego y conocen las reglas, lo que hace que se sientan líderes y capaces. Esto es fundamental para potenciar su autoestima y confianza en ellos mismos.

– El juego también sirve para desarrollar la autoestima
Esto se debe a que, a través del juego, los niños aprenden a conocerse, a saber cuáles son sus fortalezas y cómo mejorar sus habilidades.

– A través del juego también se desarrollan habilidades sociales
Especialmente en las interacciones grupales, ya que los niños necesitan aprender a negociar, a ceder, a seguir las reglas… Todas ellas son habilidades esenciales en la vida adulta.

– El juego sirve para desarrollar múltiples procesos intelectuales
Nos referimos, por ejemplo, al razonamiento lógico y abstracto, la memoria, la atención, la organización espacial, la función ejecutiva…

– Se trabaja la educación emocional
Muchas de las competencias emocionales necesarias para tener éxito en la vida se pueden desarrollar a través del juego.

Por qué hay que elegir juguetes adecuados a la edad de tus hijos

Si bien ya hemos visto que el juego tiene muchísimos beneficios para los niños, debemos tener en cuenta la edad de los pequeños a la hora de escoger qué tipo de actividades les proponemos. A cada edad, un juguete o juego. En caso contrario, el juego no conseguirá causar estas emociones agradables que promueven el aprendizaje, sino que provocarán emociones desagradables como la frustración o la ira.

Los juguetes suelen llevar en su caja un indicador de la edad óptima de uso para el niño, y es verdad que, aunque hay diferencias individuales, es bueno hacer caso a dicha recomendación. Cuando le damos a un niño juguetes orientados para más pequeños, se puede aburrir con ellos; pero cuando el juguete está indicado para más mayores, puede que no lo llegue entender o que no esté preparado para ese juego.

Puedes leer más artículos similares a 9 juegos tradicionales que NO sabías que benefician tanto a los niños, en la categoría de Juegos en Guiainfantil.com.

FUENTE: Guiainfantil.com

El juego, la educación de los niños y las Navidades

Varios expertos opinan sobre cómo deben ser los juguetes y los juegos, que no es lo mismo

Cada vez que nos acercamos a las fechas navideñas, los niños vuelven a tomar protagonismo. Se acercan fechas de vacaciones escolares, de reencuentros familiares alrededor de la mesa y con la familia y también llegarán regalos para la ilusión de los más pequeños. La sociedad consumista, a costa de campañas en los medios, mueve una cantidad increíble de recursos humanos y económicos en estas fechas.

Sus Majestades los Reyes de Oriente tienen la ayuda de los pajes y éstos a su vez, la ayuda de mucha gente que les da algún tipo de apoyo. Pero los psicólogos infantiles suman sus voces para destacar la importancia del juego en las diferentes fases del crecimiento de los niños y niñas, así como el juguete en sí.

Dedicar un tiempo (aunque no sea mucho) de manera cotidiana a jugar con nuestros hijos supone los fundamentos de un crecimiento y educación óptimos. La falta de todo contacto o dejar al niño o niña solo con un juego sin compartir ese tiempo está creando un peligroso caldo de cultivo que, con el tiempo, genera graves problemas de comunicación paternofilial en la adolescencia y puede motivar a los niños que van creciendo a mendigar el cariño de otros por la ausencia del calor de la familia.

La psicóloga Silvia Álava ha publicado, junto a otros quince profesionales de la psicología, un libro que resulta una guía para ayudar a padres y madres que no sepan muy bien cómo hacer algo como educar jugando. El libro se titula “El arte de educar jugando” y plantea los beneficio de que los niños jueguen, solos o no. En el planteamiento del libro se muestran teoría y prácticas de diferentes formas de jugar y educar al mismo tiempo. Según los autores se pueden trabajar diferentes habilidades del niño a través del juego, especialmente si se hace en familia. Se aborda desde diferentes tramos de edad, desde bebés hasta los 12 años.

El juego incluye también el deporte o la actividad física. Una de las cuestiones que aborda el libro y a la que parece que se presta más atención por parte de los padres es el del papel que tienen que jugar las pantallas en el juego. Son de una generación donde las pantallas deben formar parte del juego, pero donde debemos poner límites para evitar que se convierta en el único recurso o en el “aparca niños” de los padres.

FUENTE: menorcaaldia.com