Celebramos hoy el #DíaDelNiño con este #Vídeo ¿Cómo validar emociones con los niños?
Somos humanos y tenemos emociones. ¿Cómo validar emociones con los niños?
Sentimos, y en ocasiones es difícil manejar nuestras emociones.
Las emociones están presentes en todas las esferas de nuestra vida, por mucho que nos esforcemos en no demostrar lo que sentimos, es imposible, están ahí, y son buenas porque nos dan información de lo que nos sucede, por eso hay que aprender a identificarlas, escucharlas comprenderlas y para por último regularlas. Y eso es algo es necesario que nos enseñen a hacer.
Los psicólogos insistimos mucho que hay que validar las emociones de los niños. Es un tema complicado porque genera muchas dudas de como hacerlo y en ocasiones no lo hacemos bien.
- Emoción es lo que sentimos
- Conducta es lo hacemos
- Pensamientos en los que pensamos
Y en ocasiones en lugar de validar las emociones nos equivocamos y validamos las conductas.
Por ejemplo, mi hijo o mi hija puede estar enfadado, porque no quería recoger los juguetes y por eso chilla que no lo va a recoger y los tira. O está enfadado con su hermana y la pega. Como adultos debemos validar la emoción, decirles entiendo que estás enfado, pero nunca podremos validar la conducta de agresión. ¿Cómo lo hacemos?
Le diremos entiendo que lo que te pasa es que estás enfadado, probablemente sea porque no querías recoger los juguetes y querías seguir jugando, pero estar enfadado no significa que podamos pegar o gritar o hacer daño a los demás.
Emoción es lo que siento y conducta es lo que hago.
Con los niños se puede hablar y razonar y es bueno que trabajemos la inteligencia emocional para que sepan que es lo sienten, porque, y aprendan a expresarlo de la forma correcta. No obstante, es necesario elegir muy bien el momento y que no sea en medio de un estallido emocional. Mejor cuando ya ha pasado.
Otra cosa que nos puede ayudar es avisarles de lo que va a ocurrir. Por ejemplo, que se te lo estás pasando muy bien jugando o viendo la televisión, youtube… pero en 5 minutos tenemos que recoger para ducharnos, cenar… te aviso que en 5 minutos vuelvo para que recojamos y así ya lo sabes. Le damos la oportunidad de cerrar el juego y de prepararse.
Es importante ir, agacharnos, que nos mire a los ojos y cerciorarnos que nos ha entendido porque a veces lanzamos las órdenes desde la cocina, según vamos andando por la casa y ni nos escucharon.
Se trata de aprender a validar las emociones para que estén presentes en nuestro día a día.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir