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La vacunación en los niños

Las vacunas en los niños ¿Te da miedo vacunar a tus hijos?

Este año ha sido el año de las vacunas, ahora toca el turno de los más pequeños, y es el momento en el que los padres y las madres tienen que tomar la decisión, y lo primero que tienes que saber es que es normal tener dudas, sentir dudas a la hora de tomar una decisión en la que no controlamos todas las variables… En este vídeo te hablamos de todo ello y de las situaciones que podemos encontrarnos a partir de las diferentes decisiones que tomemos….

¿Cómo actuar en reuniones navideñas con cuñados antivacunas?

“Hacer test” y “evitar hablar del tema”

El aumento de la incidencia está generando una gran incertidumbre ante la llegada de las Navidades, momento de reuniones y celebraciones entre familiares y amigos. Esta preocupación puede agravarse en el caso de que uno de los invitados no esté vacunado. En estas situaciones hay que tener en cuenta una serie de recomendaciones, como la realización de pruebas diagnósticas.

Actualmente, la única recomendación oficial del Ministerio de Sanidad de cara a Navidad ha sido la de reducir “el número de participantes en eventos públicos y sociales”. No obstante, el aumento de los contagios está generando cierta preocupación entre la población, especialmente para quienes coincidan con personas que hayan decidido no vacunarse. En estos casos, desde un punto de vista médico, “lo más seguro es no celebrar esa cena”. Sin embargo, desde el punto de vista psicológico, se debe hacer un balance del afecto que se tiene a la persona no vacunada, y del riesgo que de está dispuesto a asumir.

Las medidas que siempre deben adoptarse en estas celebraciones son el uso de mascarilla, la distancia de seguridad y la ventilación de los espacios cerrados. En el caso de que asista alguien que no ha recibido la vacuna, Juan Antonio Pineda, portavoz de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología explica que “lo más seguro sería no tener esa cena. Y en caso de celebrar el evento “habría que exigir una prueba diagnóstica a la persona que no se ha querido vacunar, hecha ese mismo día. Y tendría que ser una PCR, no un antígeno”.

El epidemiólogo y profesor de la Universidad de Alcalá, Pedro Gullón cree que “no hay que mantener una actitud especialmente diferente” con los no vacunados. “Pero en todo caso hay que mantener medidas de seguridad como intentar no juntarse con mucha gente, que las reuniones sean en lugares abiertos y mantener la mascarilla.” Además, explica que “vacunarse no significa que todo se haya acabado. Reduce mucho el riesgo, pero no acaba todo”.

Desde el lado de la psicología, la doctora Silvia Álava, insiste en que “todos tenemos derecho a decidir. Todas las decisiones deben ser respetadas”. Tanto si alguien se vacuna o no, como si no se quiere invitar a algún no vacunado. En estas situaciones, la psicóloga explica, “¿Qué te importa más: la vacuna o la persona? Si no nos compensa, no hay que tomar el riesgo. Se trata de pasar un rato agradable”. Además, Álava da un consejo: “Con las personas que no creen en la ciencia y tienen posiciones extremistas, como los negacionistas, es difícil dialogar. Intenta no sacar el tema y no convencerles de que se vacunen si quieres tener una velada tranquila”.

FUENTE: lacronicadesalamanca.com

Adolescentes y vacuna del COVID: cómo ayudarles frente al miedo, la incertidumbre o los nervios por el pinchazo

Los adolescentes están respondiendo muy bien a la llamada de la vacunación, sin embargo también hay miedos y nervios ante los posibles efectos secundarios o incertidumbre por el qué pasará ahora una vez vacunados.

Por Beatriz G. Portalatín

Los adolescentes, mayoritariamente, se han portado muy bien durante toda la pandemia por el COVID-19 y ahora también, están respondiendo muy bien a la llamada de la vacunación. Sin embargo, como es lógico, hay miedo o nervios por el pinchazo que van recibir, por los posibles efectos secundarios, incluso por la incertidumbre del qué pasará ahora que estamos vacunados.

En España se está vacunando a todos los niños mayores de 12 años, una vez cumplidos (personas nacidas en 2009 o antes) con las vacunas de Comirnaty (Pfizer & BioNTech) y Spikevax (Moderna) -vacunas ARNm- las mismas vacunas usadas hasta ahora en los adultos. En cuanto a los efectos secundarios de estas vacunas, según explica el Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría (CAV-AEP), como todos los medicamentos, pueden provocar efectos secundarios. “La mayoría son leves y de corta duración y no todas las personas vacunadas los padecen. Los más comunes son: dolor y sensación de pesadez en el hombro y el brazo donde se ha inyectado la vacuna; sensación de cansancio, malestar general y escalofríos; dolor de cabeza y fiebre de bajo grado”.

La mayoría de los efectos secundarios son leves y de corta duración y no todas las personas vacunadas los padecen. Los más comunes son: dolor y sensación de pesadez en el hombro y el brazo donde se ha inyectado la vacuna, malestar general, dolor de cabeza y fiebre

CAV-AEP

“Es importante minimizar los efectos secundarios de las vacunas que son, como de casi todas las vacunas, realmente leves y pasajeros. Duran uno o dos días como mucho y no afectan de forma general a la vida de los pacientes. Además, para paliarlos, poder tomar analgésicos como el paracetamol”, afirma a la Sexta Ángel Hernández Merino, pediatra y miembro del CAV-AEP.

Vacunarnos es fundamental y en España la respuesta de los adolescentes en general está siendo muy buena, “si la comparamos con otros países cercanos como Francia o como Reino Unido donde no tienen esa respuesta tan buena. En España, la historia y la confianza hacia las vacunas es muy buena”, añade.

No obstante, hay que comprender y ser conscientes de que “la vacuna es un paso importante, pero necesitamos que la vacuna esté extendida por todo el planeta, no sólo en mi ciudad o en mi país, con lo cual hay que tener paciencia y seguir aún con las medidas de prevención, sobre todo con la mascarillas, con la distancia social, y evitar aglomeraciones», sostiene el doctor.

Es fundamental que «los adolescentes no pierdan la paciencia, que no se desengañen con respecto al valor de las vacunas a pesar de que tengamos que seguir aplicando un poco más todavía, as medidas de seguridad. De cara, al curso que viene, los expertos abogan por seguir aplicando de momento, y en el contexto de la variante Delta, mucho más contagiosa que las anteriores, las mismas medidas de prevención que había el curso pasado.

Nunca le digas: «No tengas miedo»

Como padres y madres, es importante que dejemos que los adolescentes expresen su miedo, «que les dejemos verbalizarlo porque sentirlo es licito y nadie puede cuestionar nuestro miedo a vacunarnos, al pinchazo o los efectos secundarios. Otra cosa es que queramos, para tranquilizarles, darles información y evidencia científica y explicarles que no pasa nada, que esos efectos secundarios son normales, y además pasajeros, en todas las vacunas, pero sentir la emoción de miedo es lícita y válida», explica Silvia Álava, doctora en psicología clínica y de la salud, psicóloga en el centro Álava Reyes y autora de varios libros, el más reciente ‘El arte de educar jugando’.

Es importante que no les neguemos su miedo, que les dejemos sentirlo y que lo verbalicen. Que les digamos «entiendo que tengas miedo y es normal tenerlo», y que después le demos información científica sobre la realidad de los efectos secundarios o las vacunas

Silvia Álava, doctora en Psicología

«Como consejo, es mucho más efectivo decirles: ‘entiendo que tengas miedo y es normal, pero ahora, vamos a ser realistas: la formula para que acabe esta pandemia pasa por vacunarnos. Es normal que haya efectos secundarios, pero éstos durarán como mucho dos días. Porque ¿qué son dos días de tu vida?», aconseja la experta.

El miedo, los nervios (y también la alegría por supuesto), es normal. No hay que olvidar que “los adolescentes lo han pasado muy mal durante la pandemia, no solo en el confinamiento sino también con las medidas de restricción. Es cierto que todos estamos ya cansados, que a todos nos afecta el no socializar como antes, pero los adultos tenemos ya formada nuestra identidad, mientras que los adolescentes aún no”, afirma Álava.

En la adolescencia -continúa la experta- esa identidad está en proceso y para ello es fundamental la figura de su grupo de referencia. De su grupo de iguales. Cuando eres niño/a se hace más a través de la familia pero durante la adolescencia, la familia pierde importancia (aunque sigue siendo importante) y pasa a tener más peso el grupo social y de iguales. Es por ello que en este caso, al no tener el contacto de siempre, las emociones se regulan peor.

De hecho, han aumentado en los adolescentes las urgencias psicológicas, los problemas de conducta y de estados de ánimo, también incluso “aquellos que ya tenían rasgos más ansiosos o más obsesivos de personalidad, la pandemia ha hecho que aumenten y que aparezcan trastornos obsesivos por miedo a la enfermedad o al contagio. También, hay otros adolescentes que sin llegar a tener un problema clínico como tal, tienen miedo y una preocupación más acusada al contagio, tanto hacia ellos como a sus familias”, añade la doctora. Además de todo esto, «se les ha dado en muchas ocasiones mensajes contradictorios, incluso se les ha culpabilizado y criminalizado en muchas ocasiones de los contagios«.

Hacerles sentir parte de algo

No hay duda de que «el final de la pandemia pasa por la vacuna», afirma Álava. No sabemos cuándo llegará el final de la pandemia (ojalá lo sepamos) pero lo que está claro que el camino pasa por vacunarnos», afirma Álava. Por eso, es importante que nuestros adolescentes entiendan «que esto es una inversión a medio-largo plazo, que por estar vacunado tu vida inmediata no va a cambiar porque vamos a tener que seguir aplicando las medidas de seguridad seguridad y prevención, pero que amedio-largo plazo, sí será el final de la pandemia. Y nosotros, con la vacuna, habremos contribuido a ello».

Es importante hacerles ver que es un objetivo mundial, que estamos viviendo algo histórico y que todos podemos contribuir

Dr. Ángel Hernández Merino, miembro del CAV-AEP.

Por ello, también es el momento de trabajar la empatía -continúa exponiendo Álava- que nos vacunamos por nosotros mismos y por los demás, que es necesario vacunarnos y que pensemos que los estamos haciendo por todos.

Realmente, afirma por su parte el doctor Hernández Merino, «es importante pensar y hacerles ver a nuestros adolescentes que estamos contribuyendo a una causa muy importante para ellos, para su familia y para el mundo entero. Que es un objetivo mundial y global, que estamos viviendo lago histórico y que todos tenemos que ayudar y empujar. Que ellos -los adolescentes- también forman parte de ese algo».

Y esto en las enfermedades y sobre todo en su erradicación o en manejo clínico, es algo muy relevante. «Todos los adolescentes y jóvenes no están vacunados contra la viruela porque hace 30-40 años atrás, todas las personas se vacunaron para erradicar el virus», concluye el doctor. Y que «ahora nosotros también, en esta pandemia podemos contribuir con nuestro pequeño granito de arena».

FUENTE: LaSexta