¿Cómo nos influyen las estaciones en nuestro estado de ánimo?
¿Por qué nos gusta tanto el verano?
- Llegan las vacaciones.
- Los días se alargan.
- Da tiempo a hacer más cosas.
- Apetece estar fuera de casa y se favorece el contacto social…
¿Qué hace que no sintamos mejor en verano?
Relación existe entre la luz solar y nuestro estado de ánimo
Si pensamos en la emoción de la alegría, pensamos en un día con un sol radiante. La emoción de la tristeza se asocia con la lluvia y el sol con la emoción de la alegría.
La exposición al sol:
- Reduce los niveles de malestar.
- Aumenta la vitalidad.
- Favorece la realización de actividades diarias y contacto social.
La red social es un factor protector de la salud mental.
En los países con menos horas de exposición de luz solar hay una mayor dificultad para regular los ritmos circadianos, y cuando no dormimos lo suficiente, nuestra salud física y mental se ven afectadas.
El sol aumenta la producción de serotonina y de endorfinas asociadas con la felicidad. Los días más cortos hacen que la personas se sientan más tristes, y la cantidad de horas de luz influye más en el estado de ánimo que la cantidad de rayos solares absorbidos.
Y eso lo notamos más en los lugares que experimentan variaciones climáticas estacionales, con temperaturas y horas de exposición a la luz solar muy diferenciadas entre el invierno y el verano, como por ejemplo en España.
La reducción de horas de luz en otoño e invierno altera los ritmos circadianos y puede llevar al Trastorno Afectivo Estacional (más frecuente en latitudes altas y en mujeres que en hombres), con síntomas como aumento del apetito, sueño y aislamiento social.
La exposición al sol aumenta la actividad en la amigdala (el área cerebral responsable de generar las emociones) y en la corteza prefrontal (que es área que se encarga de regular las emociones), lo que influye en el bienestar emocional.