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Concentración y descanso (III)

concentración y descanso¿El modo y el tipo de descansos dependen del tipo de trabajo?, ¿Sólo para los que requieran concentración mental y no para los físicos?

El descanso cuando se realiza un trabajo físico será necesario. El tipo, tiempo y cantidad de descanso, vendrá determinado por variables como el nivel de preparación de cada individuo (estado físico en general), el entrenamiento en esa actividad en particular, la fatiga acumulada, las condiciones climáticas, el estado nutricional…

Respecto a la concentración mental, lo ideal (respetando los periodos de 25 minutos de trabajo, descanso de 5 minutos), sería comenzar por una pequeña actividad de dificultad media puesto que cuando empezamos, todavía necesitamos un periodo de calentamiento para llegar al máximo rendimiento intelectual. A continuación, introducir el trabajo más complicado durante aproximadamente una hora para finalizar con tareas más sencillas y en las que interfiera menos el cansancio hasta completar un ciclo de dos horas total de trabajo. Al finalizar dicho periodo, conviene hacer una pausa más larga, para poder volver a empezar otro ciclo como el descrito anteriormente.

Concentración y descanso (II)

Método pomodoroComo el músculo, ¿ocurre que el cerebro se fatiga y necesita descansar?

 El cerebro, como cualquier otro órgano, se fatiga y necesita periodos de descanso para recuperar su buen nivel de funcionamiento. Al igual que el corazón o cualquier otro órgano no puede estar en su máximo rendimiento durante periodos demasiado prolongados de tiempo; con el cerebro pasa lo mismo. Y de hecho, para protegerse si nosotros no paramos la actividad, nuestro organismo nos obliga a parar, desviando la atención. Cuando llevamos mucho tiempo trabajando sin descanso, el nivel de concentración disminuye, aumentan las interferencias y baja la productividad.

¿De qué manera, cada cuánto habría que hacer breaks, de cuánto tiempo,  y de qué tipo (leer, dormir, pasear, deporte de cualquier tipo…)?

Como hemos explicado, lo ideal es introducir un descanso de 5 minutos cada 25; no obstante, hay que tener  cuidado con las actividades a realizar  en ese descanso, no se trata de seguir con el libro, o consultar el ordenador, el correo electrónico o redes sociales, en las que seguimos forzando la vista, la postura y realizando actividades de tipo cognitivo; lo ideal es levantarnos, estirar los músculos, mirar por la ventana para cambiar el ángulo de enfoque, e intentar fijar la vista en un punto lejano, aprovechar para ir al baño, a por agua… Pasados esos 5 minutos, retomaremos el trabajo, con una mayor predisposición y mejor concentración.

Concentración y descanso

Durante esta semana, vamos a hablar sobre la concentración, resolveremos dudas sobre estos procesos y estableceremos pautas para mejorarla, tomando como base la colaboración realizada para el diario El País por la la Doctora Montserrat Montaño y yo misma.

¿Es cierto que la concentración y la creatividad son como un músculo que necesitan descansos regulares?

 Por supuesto que sí. Diversos estudios demuestran que es complicado que la atención sostenida permanezca más de 25 minutos seguidos, por eso es bueno introducir descansos de 5 minutos cada 25 minutos de trabajo. Se trata de entrenar la atención, la concentración, de ser más productivos, y el tener el tiempo acotado nos ayudará a mejorar la capacidad de atención. Estar más horas no significa producir mejor, la productividad se mide por el número de objetivos conseguidos, no por el tiempo empleado.