Sobrevivir al síndrome postvacacional (yII)

Finalizamos con la segunda parte del decálogo para recuperar la rutina con más facilidad:

Buscarse motivaciones reales: las metas han de ser realistas, es decir, que puedan conseguirse.

Ser constantes: hay que aprender a mantenerse motivados sin desfallecer.

Tener una actitud optimista.

Evitar ansiedad: resulta de ayuda traer a la mente pensamientos positivos y experanzadores cuando se experimenten los primeros síntomas de ansiedad, como palpitaciones, respiración rápida, etc.

Encontrar el lado positivo de la rutina (que lo tiene!): por ejemplo, el tiempo cunde más cuando se tienen las actividades programadas.

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