¿Podemos evitar las agresiones en los colegios?

El colegio debería ser el lugar más seguro para nuestros niños y jóvenes, pero hechos aislados con mayor agresividad nos hacen pensar en situaciones de desajuste emocional muy intenso que no se ha sabido gestionar. Por ello es tan importante la educación y gestión emocional, para poder aprender a regular nuestras emociones y capacidades de comunicación.

Comparto este podcast del programa Las Tardes de RNE donde hablamos de todo ello.

#educacióninfantil #emociones #colegio #clase #agresividad #niños #jóvenes #desajusteemocional #gestiónemocional #educación #aprender #regularemociones #comunicación #podcast #lastardesderne #ventilaciónemocional

Presentación de la colección de libros «Crecicuentos»

El 4 de octubre a las 18:00h tendrá lugar la presentación, por parte de la Editorial Sentir, de la colección completa de los cuentos de Dani: los «crecicuentos».

Podrás verlo en directo a través de este enlace de Youtube, comparto contigo la escaleta del evento:

18:00 – Breve presentación a cargo de Mercedes Bermejo (5 minutos)

18:05 – Mónica Gonzalo (5 minutos)

18:10 – Javier Urra (5 minutos)

18:15 – Mar Romera (5 minutos)

18:20 – Begoña Ibarrola (5 minutos)

18:25 – Silvia Álava (5 minutos)

18:30 – Ronda de preguntas (5 minutos)

10 consejos que te ayudarán a hacer más fácil la vuelta al cole

Llega septiembre y con él la vuelta al colegio. En este vídeo os proponemos 10 consejos que podemos seguir para llevarla a cabo de la mejor forma posible:

  1. Adaptar los horarios un poco antes.
  2. Cuida las horas de sueño y el descanso.
  3. Alimentación sana y equilibrada.
  4. Procura que se hidraten correctamente.

#vueltaalcole #educaciónindantil #colegio #educación #educacióninfantil #consejos #horarios #adaptación #sueño #dormirbien #alimentaciónsana #alimentaciónsaludable #hidratación #cerebro #emociones #psicología #modelo #modeloparatushijos #hijos #buscar #lobuenodelavida #planifica #actividades #actividadesagradables #preparar #materialescolar #paciendcia

¿Y si le doy un pico al niño?

Los psicólogos no lo recomiendan y los médicos tampoco, pese a que el riesgo de contagio de enfermedades es pequeño

Por Yolanda Veiga

Nada tiene que ver este asunto con el polémico pico de Luis Rubiales a Jenni Hermoso, aunque la referencia sea obligada porque llevamos semanas hablando del ‘pico’. Hecha la mención, abordamos la costumbre de dar besos en la boca a los niños, liberado este acto, obviamente, de toda connotación sexual. Se trata de una costumbre que los expertos aseguran no está muy extendida en nuestro país y en la que, hasta la polémica, no habíamos ni reparado. Es también un hábito relativamente nuevo, ya que en las generaciones anteriores rara vez se veían en las familias tales muestras físicas de afecto. Psicólogos y médicos opinan sobre la conveniencia o no de dar picos a los pequeños. Y mayoritariamente están por el no.

«Cuando crecen les puede hacer sentirse incómodos» Silvia Álava Psicóloga

Sobre los afectos a los niños hay evidencia científica: «Un abrazo ya reduce la ansiedad y los niveles de cortisol», recuerda la psicóloga Silvia Álava, del gabinete madrileño Álava y Reyes. Y lo mismo sucede con las caricias, los besos…, «especialmente beneficiosos para los niños más pequeños, que aún no han desarrollado el lenguaje». Ahora bien, «no hay por qué demostrar ese amor con un beso en la boca. El afecto es igual cuando se da en la mejilla». De hecho, Álava no se muestra partidaria de los picos a los niños. «Los críos no tienen esa connotación sexual, así que a esas edades tempranas no hay tampoco que temer por ese lado. Pero a medida que crecen, los besos en la boca sí van adquiriendo para ellos ese significado y se pueden sentir molestos. Para evitar ese momento incómodo de decidir cuándo dejar de besar a los niños en la boca es mejor no hacerlo nunca», advierte la experta quien, por otro lado, se felicita de que «hayamos roto esas barreras de generaciones anteriores para ser más conscientes de la importancia de la demostración de los afectos».

«Se normaliza algo que choca contra la norma social» Guillermo Fouce 

    Reconoce Guillermo Fouce que el asunto le genera «cierta controversia» y cree que sí, que puede llevar a error a los niños. «Yo pondría el foco en el choque con las normas sociales que un beso en la boca supone. Resulta violento porque no es algo socialmente aceptado, de manera que si besamos a nuestros hijos en la boca ellos entenderán que es normal. No solo eso, como es su manera de relacionarse, tenderán a querer dar besos a todo el mundo», advierte el psicólogo.

    ¿Entonces? «Hay que explicarles desde pequeños que esos besos se dan con mamá o con papá e indicarles a quién pueden dárselos y a quién no. Porque si se lo da a alguien que lo rechaza o se violenta van a pensar que les rechazan a ellos porque han hecho algo mal. No lo van a entender».

    «No es tiempo suficiente para contagiarse de nada» Jorge Muñoz Pediatra

      «Así como en países como Reino Unido es muy habitual y casi todas las familias besan a sus hijos en la boca, en España es algo más bien anecdótico», habla por lo que ve en la consulta el doctor Jorge Muñoz, director del ‘Espacio Jorge, el pediatra’. Al margen de la costumbre, en lo que respecta a la salud, no pone el especialista objeciones. «Un hábito mucho más extendido y mucho menos higiénico es el de que los padres chupen el chupete antes de dárselo al bebé cuando este se ha caído al suelo. Y así sí que se contagian enfermedades», advierte Muñoz.

      Pero un pico de un segundo, dice, «no es un riesgo». «Es un beso rápido, no continuado, así que no da tiempo suficiente a que se contagien enfermedades así, sería extremadamente difícil. Además, no hay intercambio de saliva», recuerda.

      «Es innecesario, debe ser algo excepcional» Antonio Torres Médico de familia

        Recuerda el doctor Antonio Torres que «los niños son una fuente de transmisión de enfermedades» y aunque un pico rápido no suponga un alto riesgo precisamente por el poco tiempo de exposición, «cualquier gesto que favorezca la transmisión no parece lo más indicado». Antonio Torres, responsable del grupo de trabajo de salud mental de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) considera, «desde el punto de vista estrictamente médico, que besar a los pequeños en la boca es «algo innecesario» y, por tanto, «debe ser un gesto excepcional porque, además, no olvidemos que los niños tocan cosas, gatean, se llevan las manos a la boca… Así que mejor evitarlo».

        FUENTE: ideal.es

        Aprovecha estos siete días para preparar la vuelta al cole

        Los expertos recomiendan ir incorporando desde justo una semana antes las nuevas rutinas

        Por Yolanda Veiga

        Esta es la verdadera operación retorno, la de la vuelta al colegio y a la oficina. A los niños aún les queda una semana de margen. Y conviene aprovecharlo. «Volver a clase implica ajustarse a ciertas rutinas y conviene empezar alrededor de siete días antes –o sea, hoy–. No puede ser que la noche antes los chavales estén danzando a las once de la noche», advierte la psicóloga Silvia Álava, del gabinete madrileño Álava y Reyes. Sueño, comidas, ocio… Hay que readaptar el cuerpo… y la cabeza. A propósito de esto último, nada de decirle al niño que no quiere volver a la escuela eso de: ‘Anda, si te lo vas a pasar muy bien…’, porque lograremos el efecto contrario.

        Levantarse cada día diez minutos antes

        El próximo jueves y viernes regresan al colegio la mayoría de los niños, así que aún estamos a tiempo. «Lo ideal es ir cambiando la rutina desde siete días antes. La prioridad es ajustar el horario de sueño. Y lo conseguiremos sin esfuerzo si cada día levantamos a los niños diez minutos antes y ganamos esos diez minutos para acostarles», recomienda la experta. Eso, durante una semana entera, implica adelantar el horario más de una hora.

        Comidas más cortas

        Lo mismo que hay que adelantar la hora de irse a dormir, hay que hacerlo con la de las comidas. «Además de ir adecuándolas al horario escolar, hay que acortar el tiempo que le dedicamos».

        Una botella de agua en la mochila

        «Tan importante como comer bien –menos chucherías y ultraprocesados–, es que los chavales estén bien hidratados porque un nivel de deshidratación del 1% o el 2%, que es cuando empezamos a notar sed, ya implica que procesemos los pensamientos de manera más lenta». Así que, recomienda Silvia Álava, «recordemos a los niños, que no siempre tienen bien adquirido el mecanismo de la sed, que vayan bebiendo más agua y que lleven cada día una botellita dentro de la mochila».

        «Entiendo que estés triste por la vuelta a clase»

        Habrá críos encantados con la perspectiva de la vuelta y otros menos. A estos últimos eso de: ‘No estés triste, que te lo vas a pasar muy bien’ no les sirve de nada, sostiene la especialista. De hecho «es contraproducente porque no les permitimos validar su emoción». Y ese es el primer paso para adaptar la mente a la vuelta. «Hay que validar lo que siente el niño con frases como: ‘Entiendo que estés triste porque hay que volver al cole’, ‘comprendo que estés enfadado porque se han acabado las vacaciones’». Identificada la emoción –tristeza, enfado, nervios…– conviene explicar la causa: está nervioso porque no sabe con qué compañeros le va a tocar, porque el año pasado lo pasó mal en clase… «Le vamos preguntando si es eso lo que les pasa. Y luego ideamos la estrategia para manejar esa emoción. Además de decirles que es obligatorio volver al cole, recordamos los momentos buenos del año anterior. ¿Y si no los ha habido? «Intentamos poner remedio a lo que ha ido mal: si le han puesto muchas faltas por llevar los deberes sin hacer, podemos comprar una agenda para apuntarlos, si ha suspendido varias asignaturas conviene establecer un plan de estudios…».

        Y muy importante: «Si la madre dice: ‘Qué pereza me da ir a trabajar’, los niños identifican el trabajo o la escuela con lo malo y las vacaciones con lo bueno».

        Consejos para el primer día en la oficina

        • Depende del trabajo «Si tu trabajo está muy estructurado, las tareas bien definidas y alguien te ha sustituido, no adelantes nada los días antes. Si, por el contrario, tu trabajo es más creativo o diriges un equipo de gente, conviene empezar a mirar el correo electrónico el día antes, incluso llamar a algún colega de la oficina para que nos cuente cómo van las cosas. Si no, nos encontraremos con mucho trabajo acumulado el primer día», advierte Elisa Sánchez, psicóloga especialista en trabajo y relaciones laborales.
        • Volver de vacaciones la noche antes, mala idea «Llegar la tarde antes supone una sobrecarga de la vida personal y familiar para ese primer día en la oficina. Así que, si tienes ocasión, ven uno o dos días antes, pon a punto la casa, visita a los familiares y así esa primera jornada el foco estará puesto en el trabajo».
        • El teletrabajo ayuda «Que alguno de los primeros días podamos teletrabajar, incluso trabajar menos horas, no cabe duda de que hace la vuelta más relajada. Porque pasar de estar ociosos a trabajar ocho horas es un cambio brusco», reconoce la experta.
        • No seas tan exigente Ese cambio «brusco» es, muchas veces, inevitable. Y tiene consecuencias. «Aunque no está considerado una patología, el bajón posvacacional afecta casi al 60% de los trabajadores», da la cifra Elisa Sánchez. Así que es frecuente. Lo que no es frecuente es que se alargue. «Si pasan diez días y seguimos igual hay que consultar con un profesional». Y luego hay que tener en cuenta la personalidad de cada uno. «Ese bajón afecta más a las personas muy exigentes o perfeccionistas, a las que también les cuesta desconectar en vacaciones, llevan mal los cambios en el trabajo…».

        ¿Se le ha olvidado la contraseña otra vez?

        No es raro que se nos olvide la contraseña a la vuelta de vacaciones. Bien lo saben los ciberdelincuentes, que envían correos o mensajes al móvil con enlaces para pinchar y recuperar la contraseña o renovarla. «Lo están haciendo simulando ser los del banco, pero nunca se deben pinchar en esos enlaces», advierte Javier Aguilera, director general de Ikusi España, empresa de servicios de tecnología e infraestructuras de comunicación y ciberseguridad. Otra estafa habitual de estas fechas, alerta, es la del ‘mensaje del falso CEO’: «Como es habitual que en septiembre los consejeros delegados y los directores generales envíen comunicaciones a los trabajadores, hay delincuentes que simulan esos mensajes, muy creíbles, por cierto, y piden a algunos empleados que hagan una transferencia de dinero de la empresa alegando que es un tema confidencial y que lo hagan rápidamente».

        FUENTE: elcorreo.com

        ¿Cómo conseguir que los niños sean más responsables sin enfados ni castigos?

        Por Ana Camarero

        Nos lo han dicho en casa y en la escuela

        “Tienes la habitación como una leonera”. “Has vuelto a olvidarte las zapatillas de gimnasia en casa”. “Nunca recoges los juguetes”. “Nunca te responsabilizas de tus cosas”. Estas son algunas de las frases que todos, en algún momento de nuestra niñez o adolescencia, hemos escuchado de nuestros padres en un intento por hacernos más responsables en casa y también en la escuela. La RAE entiende por responsable a aquella persona que “pone cuidado y atención en lo que hace o decide”, y que está “obligada a responder” de ciertos actos.

        Existen dos factores que influyen para que alguien sea o no responsable durante su infancia y adolescencia.

        Uno es que el modelo paterno o materno sea especialmente sobreprotector e impida que los hijos asuman las responsabilidades que les corresponden. “Estaríamos hablando de una actitud aprendida”, explica la psicóloga infantil Silvia Álava. El segundo factor es su personalidad, pues “hay niños que desde pequeños son mucho más responsables, como rasgo de su carácter, y, sin embargo, otros lo son menos”, añade.

        El niño irresponsable se comporta ante sus progenitores de dos maneras diferentes y muy definidas. “Hay niños que, cuando deben tener una responsabilidad, directamente se enfrentan con los padres. Y otros que no se oponen directamente a la petición que les hacen los mayores, pero al final eluden hacer lo que se les pide”, explica la también autora de los libros Queremos hijos felices y Queremos que crezcan felices.

        La modificación de esos comportamientos necesita de una labor continuada de los tutores.

        Una tarea que pasa por dejarles entrever que ser irresponsable tiene unas consecuencias que deben enfrentar y asumir. “En la mayoría de las ocasiones, si no hace las tareas o los encargos fijados por la madre o el padre, los progenitores caen en la actitud del ‘no pasa nada, ya lo hago yo’. De esta manera, el menor aprende que las cosas pueden dejar de hacerse perfectamente porque, aunque le regañen o castiguen, al final consigue no hacerlo”, explica Álava. Para combatir estos gestos es necesario sentarse con ellos y enseñarles que si no ayudan en casa, no recogen su ropa o se dejan la flauta olvidada cuando tienen la asignatura de Música, ocurren cosas: “No a través del castigo directo, sino con resultados directos, para que asuman lo que sucede cuando uno no se comporta con responsabilidad”. Eso sí, señala Álava, “sin enfados ni inquinas o castigos”.

        Pero, a veces, no resulta fácil guiar a este tipo de niños

        “para conseguir el equilibrio entre alimentar su autoestima, para que se sienta capaz e interesarle por el mundo que le proponemos los adultos, y la firmeza en los límites”, sostiene Carlos M. Jordán, psicólogo clínico del servicio de Psiquiatría del Hospital Universitario de Fuenlabrada (Comunidad de Madrid). Esa mesura hay que lograrla en todos los ambientes, educativos y familiares. Sin embargo, añade Jordán, si el comportamiento inadecuado se ciñe a un solo ambiente, el problema estará en ese escenario, casi con seguridad, más que en la niña o el niño.

        Observar el ambiente

        Para poner soluciones a esas actuaciones se aconseja a los padres observar el ambiente. Analizar si hay problemas o cambios importantes en casa, si ha habido alguna pérdida significativa o si puede estar pasándole algo en el colegio. “Antes de buscar problemas en los niños tenemos que evaluar el entorno en el que crecen. Los niños son muy sensibles al ambiente, pues están en pleno desarrollo y un cambio en la dirección adecuada en casa puede tener efectos muy beneficiosos”, puntualiza Jordán. Si no hay nada que modificar, ni otros problemas obvios que requieran atención por sí mismos, “como el habitual uso excesivo de aparatos electrónicos y redes, algún tipo de abuso, etcétera, es conveniente consultar a un profesional que pueda hacer un diagnóstico adecuado”, argumenta el psicólogo. De ese modo, según explica por su parte Álava, el experto, en función de la edad, de la personalidad y de las características de cada uno de los hijos, analizará cuáles son las responsabilidades que deben asumir, pero de una en una. Para esta experta no se pueden cambiar los hábitos de la noche a la mañana: “Porque si no, el niño o adolescente puede colapsar y sentirse fracasado”, añade. Una vez que se han establecido las tareas que van a ser su responsabilidad hay que ir haciendo una labor de refuerzo que se prolonga en el tiempo según va comprometiéndose en las labores establecidas, añade Álava.

        La complicidad de las familias

        La complicidad de las familias con el resto de los entornos en los que se mueve al niño y el adolescente es también un elemento a tener en cuenta para encauzar su irresponsabilidad. “Hay que trabajar de manera conjunta en la familia, pero no solo los padres, sino también el resto de familiares o amigos, y el ámbito educativo”, afirma Álava. En el caso de la escuela, el diálogo entre los progenitores y los docentes debe ser fluido para que si, por ejemplo, están trabajando la autonomía en el aula, los padres trabajen en la misma dirección en casa. “Muchas veces, el adulto teme los efectos puedan tener sobre su hijo no llevar hechos los deberes o que olvide el estuche de lápices en casa. Lo único que sucederá es que aprenderá para próximas ocasiones. Ser responsable desde pequeño evitará las consecuencias de no hacer las cosas conforme van transitando hacia la edad adulta”, afirma esta experta.

        FUENTE: MSN.COM

        ¿Cómo intentar ayudar a los huérfanos de la violencia de género?

        Atravesamos un momento atroz en esta lacra que es la violencia en el entorno familiar, pero cuando ademas estos hechos suceden en presencia de los hijos, a la vista de los menores, las consecuencias psicológicas y emocionales son aún más demoledoras…

        En esta entrevista para «La Linterna» intentamos dar algunos consejos para que el entorno más cercano a estos niños (abuelos, tíos, primos, profesores…) pueda de alguna manera ayudar a atenuar las consecuencias…


        #noalaviolenciadegenero
        #entornofamiliar #emociones #psicología #familia #niños #crianza #hijos #menores #consecuencias #entrevista #LaLinterna #consejos #entorno #abuelos #tíos #primos #profesores #ayuda #atenuar #consecuencias

        Los expertos insisten en que lo digital aísla a los niños y la lectura los forma en valores

        Aseguran que es “fundamental” que vean leer a los adultos y poner límites al uso de dispositivos

        El verano puede ser la época perfecta para que los niños lean más o se inicien en la lectura, aunque muchos optan por utilizar todavía más dispositivos con pantallas. Así lo aconsejan expertos consultados por Servimedia que piden a los padres que ellos den ejemplo.

        Leer es mucho más que la capacidad de reconocer letras, unirlas y formar palabras u oraciones. “Los beneficios de la lectura en niños son muchísimos, sabemos que es algo que mejora la comprensión lectora, que además mejora la riqueza y la fluidez del vocabulario y mejora también otra serie de procesos intelectuales, además de la empatía”, manifestó a Servimedia la psicóloga infantil Silvia Álava.

        Los autores de los libros infantiles también quieren transmitir con sus historias valores y enseñanzas pedagógicas. La escritora Cristina Hermoso de Mendoza, que publicó recientemente su primer cuento infantil ‘Melón y Sandía’ con carácter solidario, explicó, en este sentido, que espera que su libro sea “una semilla de apertura, tolerancia y compromiso” y que conseguirlo en la infancia es “muy positivo”.

        Aumento del uso de pantallas

        Sin embargo, estudios nacionales, como el de la Fundación Gasol (Pasos 2022), apuntan que los niños y adolescentes aumentaron su uso de pantallas entre semana de un 54,8% en 2019 a un 64% en 2022. Este hábito está relacionado tanto con el excesivo sedentarismo como con la reducción de horas de sueño o la calidad de vida en general.

        Un abuso de la tecnología produce también aislamiento entre los menores, un concepto que Álava denominó ‘desplazamiento digital’. “En verano los niños hacen mucho ocio online y esto está desplazando otro tipo de cosas como leer, quedar con amigos, estar en el parque…estamos dejando de hacer cosas que son especialmente beneficiosas”, remarcó.

        Por este motivo, la psicóloga comentó que

        “Es fundamental que los niños nos vean leer a los adultos, es muy complicado que se enganchen a la lectura si nosotros no leemos”.

        La responsable de Comunicación de Penguin Infantil, Melca Pérez, subrayó que “lo más importante es que nos vean a los adultos leer. Si nos ven todo el día con el móvil, la lectura no se convertirá en su afición favorita nunca”.

        No obstante, desde la editorial SM consideran que la literatura infantil y juvenil “está viviendo una edad de oro”. La gerente de Literatura Infantil y Juvenil de la editorial, Berta Márquez, afirmó que “se publica más que nunca porque se vende más que nunca, solo en los últimos dos años el mercado ha crecido un 20%”.

        El uso de las pantallas en niños no siempre es malo.

        Según Silvia Álava, “hay que tener en cuenta la variable de con quién está el niño viendo la pantalla y qué es lo que está haciendo. No es lo mismo, por ejemplo, estar viendo una película juntos en el salón que esté él solo en la habitación viendo un video de YouTube. No tenemos que guiarnos por el tiempo, minuto arriba, minuto abajo, sino qué es lo que estamos haciendo”. Para imponer límites digitales a los más pequeños, la psicóloga recomienda realizar un proceso de alfabetización digital, “los padres no pueden estar al margen del uso de los aparatos electrónicos de los niños, hay que estar al lado poniendo límites y enseñando qué es lo que hace o no se hace en este mundo online”.

        En cuanto a la lectura, sea cual sea la opción de los niños, lo importante es tener en cuenta sus gustos y que sean ellos mismos quienes decidan los títulos que van a leer. Así la lectura no será una obligación, sino que se irá convirtiendo en un hábito que ellos mismos busquen.

        © SERVIMEDIA. Esta información es propiedad de Servimedia. Sólo puede ser difundida por los clientes de esta agencia de noticias citando a Servimedia como autor o fuente. Todos los derechos reservados. Queda prohibida la distribución y la comunicación pública por terceros mediante cualquier vía o soporte.

        FUENTE: lavanguardia.com

        Juegos de lógica para desarrollar el pensamiento crítico de los niños

        Actividades cotidianas y juegos para enseñar a pensar con sentido crítico a tus hijos

        Fomentar el pensamiento crítico en niños y niñas, que aprendan a tener su propio criterio y que sepan evaluar el mundo que les rodea, es tan importante como la educación en valores. Solo así podrán cambiar la sociedad para mejor y ser plenamente felices. La doctora en psicología y autora de libros como ‘El arte de educar jugando’ Silvia Álava nos explica punto por punto de qué modo desarrollar el pensamiento crítico en los hijos a través de actividades y juegos de lógica.

        ¿Qué es el pensamiento crítico de los niños y para qué sirve?

        Pensar por uno mismo y con sentido crítico es básico para que los niños sepan cuando alguien les quiere manipular, así como para que sean capaces de tomar sus propias decisiones, lo que les hará convertirse el día de mañana en adultos con alta capacidad de razonamiento y discernimiento.

        Y es que, qué padre o madre no desea para su hijo que sea independiente, que nadie le diga lo que tiene que hacer, sino que sepa actuar, opinar y decidir por sí mismo, ¿verdad? Las decisiones razonas que toma el niño evitarán que conteste sí a todo o que solo haga o deje de hacer cuando un adulto o un igual se lo indique. De ahí, la importancia de enseñar a los niños a través de los juegos a desarrollar su pensamiento crítico.

        Pero desarrollar el pensamiento crítico en la infancia y la juventud de los hijos no solo supone un bien para ellos en su realidad presente, sino también el día de mañana cuando se conviertan en adultos y deban decidir qué estudiar o a qué trabajo aplicar.

        Teniendo en cuenta que la mejor forma para que un niño adquiera un aprendizaje es a través de las actividades lúdicas, a continuación te ofrecemos una lista de algunos juegos de lógica que te ayudarán a desarrollar el pensamiento crítico de los niños (un poco más abajo los explicamos con más detalle):

        • Juegos de preguntas y respuestas
        • Organizar debates en casa sobre distintas cuestiones (o tras la lectura de un cuento)
        • Juegos de apilar bloques o encajables
        • Juegos de mesa como el Quién es Quién o Adivina quién

        Mejores juegos de lógica para fomentar el pensamiento crítico infantil

        Para que los niños aprendan a razonar, a pensar con criterio, a sacar sus propias conclusiones y a dar respuestas fundamentadas, puedes llevar a cabo una serie de juegos de lógica según su edad y nivel de desarrollo. Aquí te proponemos algunas ideas que te servirán de inspiración.

        – Los juegos de apilar bloques o fichas que tanto gustan a los más pequeños les hará entender de qué modo hay que colocar cada pieza para que la torre no se caiga y eso es algo que bien pueden aprender a través del ensayo error, ¿no te parece? Este tipo de juguetes de bloques puedes ofrecerlos desde la primera infancia.

        – Los encajables también son idóneos para desarrollar el razonamiento infantil pues han de deducir si cabe un cuadrado o bien un triángulo. Algo que también pueden hacer al clasificar piezas u objetos cotidianos por colores, tamaños o formas. Estas sencillas actividades se convertirán en juegos de lógica muy útiles para los niños más pequeños.

        – Según vayan creciendo les puedes ofrecer el juego del Quién es quién (también conocido como Adivina Quién o Guess Who) para trabajar la lógica. Una partida en casa de este juego de mesa y verás como su mente se activa.

        – Juegos de debate que invitan a los niños algo más mayores a pensar. Después de ver una película o leer un cuento, puedes plantear preguntas como: ¿Qué opinas sobre…? ¿Qué habrías hecho tú si fueras este personaje? ¿Qué cambiarás sobre la conducta de…?

        Cómo enseñar lógica a los niños desde que son pequeños

        Reforzar este tipo de pensamiento crítico con los hijos no es tan complicado como parece, tan solo hay que comenzar con el uso de la lógica. A continuación te proponemos algunas ideas para trabajar el criterio y el sentido crítico de tus hijos.

        – Cuando te pregunten cosas sencillas como ‘¿me tengo que quitar el jersey?’ en lugar de decir sí o no invítale a que reflexione sobre la necesidad que siente en ese momento.

        – En vez de decir ‘te lo dije‘, explica las cosas de manera sencilla, pero permite que sea él, dentro de la medida de sus posibilidades, quien tome las decisiones y después se pare a pensar sobre sus aciertos y errores.

        – Utiliza el refuerzo positivo, todo lo que puedas y más, para que se vea capaz y su autoestima sea lo más sana posible.

        – Sé un ejemplo para tus hijos, no temas hablar delante de ellos sobre ciertos aspectos de la sociedad que te gustaría que cambiaran siempre en un tono respetuoso y constructivista.

        – Muéstrales cuál es la diferencia entre un hecho y una opinión, en especial ahora que vemos tanta y tanta información, no siempre veraz, en los medios de comunicación.

        Utiliza las situaciones cotidianas para estimular su razonamiento

        Recuerda que además de los juegos de lógica y razonamiento, puedes emplear situaciones de la vida cotidiana para hacer tú misma uso del pensamiento crítico y así hacerles entender a los niños, poco a poco, lo maravillosa y potente que es su mente: explica las cosas a tus hijos con palabras sencillas acordes a su edad, por ejemplo: ‘Ahora no nos podemos quedar en el parque porque se hace tarde y tenemos que terminar los deberes, pero el fin de semana tendremos más tiempo para jugar juntos’.

        Por otro lado, cuando se acerquen a ti a contarte algo (que han tenido un problema en el colegio o que están contentos por las buenas notas) te debes convertir en todo oídos para ellos mirándoles a los ojos mientras te hablan. Emplear la escucha activa hará que los niños se sientan escuchados y valorados.

        En lugar de solucionar los problemas a la primera de cambio, les puedes hacer preguntas como ‘¿qué crees que se puede hacer?’, ‘¿se te ocurre alguna idea?’, ‘¿te parece si probamos a hacer esto?’. Siempre tratando de mostrar nuestro apoyo, pero dándoles margen para que busquen soluciones por sí mismos.

        Por último, que no menos importante, para estimular la lógica y el pensamiento crítico debemos procurar que nuestros hijos e hijas aprendan a decidir, ya sean pequeñas o grandes cuestiones: la ropa que se van a poner hoy, si quieren manzana o plátano para la merienda o qué le gustaría ser de mayor.

        Puedes leer más artículos similares a Juegos de lógica para desarrollar el pensamiento crítico de los niños, en la categoría de Aprendizaje en Guiainfantil.com.

        El abuso de las pantallas dispara los problemas de lenguaje en menores de tres años

        Andrea Domene Lupiañez

        Madrid, 6 jul (EFE).- Pediatras, psicólogos y logopedas han alertado de un gran incremento de niños menores de tres años con retraso psicomotor, lo que implica una disminución del uso del lenguaje, debido a una mala utilización de las pantallas en un momento en el que son «especialmente vulnerables».

        DURANTE LOS 3 PRIMEROS AÑOS DE VIDA

        «El 85 % del desarrollo neuronal en los niños -tanto en comunicación como en bienestar social- se produce en los tres primeros años de vida», advierte la psicóloga Silvia Álava, quien asegura que los menores tienen que experimentar en un entorno multisensorial que no son capaces de percibir con la tecnología.

        Una opinión que comparte su colega del Colegio Oficial de Psicología de Madrid, Mercedes Bermejo, al explicar que los niños dejan de recibir estímulos sensoriales muy importantes en la infancia, al tiempo que, con los aparatos tecnológicos, se enfrentan a una sobreestimulación para la que sus cerebros no están preparados, lo que puede tener graves consecuencias.

        En este sentido, la pediatra de Atención Primaria, Pilar Mallada, destaca que esta estimulación de las pantallas lleva a los menores a confundir la realidad y la ficción.

        Por ello, los expertos insisten en que los niños tienen que aprender en contextos naturales. De esa manera también se evitará que se aburran con los maestros en clase si estos «no llevan el ritmo al que se han acostumbrado con la tecnología».

        CARRITOS CON LACTANTES VIENDO PANTALLAS

        Aunque sea un problema que afecta en todos los ámbitos y a todas las edades, las pediatras revelan que las consultas se llenan cada vez más de «carritos con lactantes viendo una pantalla», así como que han detectado «más conflictos en las dinámicas familiares».

        «Es tiempo en el que nos dejan en paz”, según la logopeda Sara Serrano Díaz, quien destaca que las familias están cada vez más ocupadas y, como no quieren renunciar a su tiempo, cada vez entregan antes un dispositivo a los niños para que se entretengan.

        PROBLEMAS CON EL LENGUAJE

        Serrano echa mano de estudios científicos que constatan una relación entre el número de horas de exposición a las pantallas y una disminución de la materia blanca del cerebro que perjudica el aprendizaje del lenguaje.

        Además, esto influye en una disminución del tiempo de juego con iguales y el descenso de la comunicación en la familia, actividades que para la logopeda son esenciales para un correcto desarrollo del lenguaje.

        RECOMENDACIONES DE USO

        «Nada de pantallas antes de los dos años». Esta es la recomendación de los expertos consultados por EFE, de acuerdo a la pauta de la Academia Americana de Pediatría. Además, sugieren limitar a media hora al día el uso de la tecnología hasta los 12 años y con control parental sobre los contenidos.

        Todos advierten de que el debate no se centra en si la tecnología es buena o mala, si no en el uso que hacen de ella los menores de tres años y las graves consecuencias que puede tener en el futuro.

        PROBLEMAS FUTUROS

        Mal manejo de las emociones, falta de concentración, poco autocontrol, inmadurez emocional, dificultad para las habilidades sociales e incertidumbre a la hora de la comunicación en la vida real son también problemas que puede generar el uso excesivo de las pantallas según crece la persona.

        «A nivel emocional pasa factura desarrollando menos tolerancia a la frustración, no aprendiendo a demorar las recompensas y sin saber gestionar el auto control», advierte la psicóloga Silvia Álava, mientras la pediatra Mallada también resalta que pueden aparecer problemas físicos como hipertensión, obesidad y problemas oculares.

        PEOR COMPRENSIÓN LECTORA

        La logopeda insiste en que «no es lo mismo leer en pantalla que en papel», ya que la unidad espacial del libro favorece la representación mental, por lo que cada vez se aprecia peor comprensión lectora en los menores.

        Según Serrano, el uso de las tabletas en clase para la lectura en niños menores de 8 años está haciendo que no se trabaje adecuadamente la comprensión lectora. «Esto conlleva falta de pensamiento crítico, de reflexión, así como peor rendimiento o dificultades de aprendizaje».

        Pero además, implica que a los niños les guste menos la lectura porque les cuesta esfuerzo y «el esfuerzo en el aprendizaje es clave», insiste.

        EFE

        FUENTE: LAVANGUARDIA.COM